El pleno de Riba-roja de Túria aprobó el viernes el presupuesto de 2016 que asciende a un total de 23,5 millones de euros, un aumento del 9% respecto de las cuentas del pasado ejercicio cifradas en 21,4 millones. Las previsiones del gobierno local reflejan un superávit de 274.000 euros. Las cuentas son las más elevadas del Camp de Túria, frente a Llíria con 18 millones y la Pobla de Vallbona con otros 16.
Después de un año en el gobierno, el tripartito „PSPV, Compromís y Esquerra Unida„ por fin logra sacar adelante los presupuestos gracias al apoyo indispensable de Ciudadanos y a unas arduas negociaciones. El Partido Popular y Riba-roja Pot votaron en contra del documento. Por partidas cabe destacar un incremento del 30% en el gasto social (1,2 millones de euros), las políticas de educación con otro aumento del 15%(966.000 euros) y las inversiones en programas e iniciativas culturales que se duplican hasta el 56%(565.000 euros). También, las políticas de ayuda a la creación de empleo y formación serán una prioridad para el gobierno local: estas asignaciones se han ampliado en un 94% (746.000 euros). Por último, el alcalde socialista Robert Raga lamentó «la actitud que el Partido Popular y Riba-roja Pot han mantenido a lo largo del pleno y que corrobora la pinza que desde hace meses mantienen en contra del equipo de gobierno sin que les importe lo más mínimo sus ciudadanos y las necesidades sociales que padecemos; por contra, Ciudadanos ha dejado clara su responsabilidad más allá de posibles diferencias ideológicas», remarcó.
