Alrededor de unas 200 personas, entre amigos, vecinos y familiares del matrimonio de Sueca que hoy tendrá que entregar el niño que tienen en acogida preadoptiva a su madre biológica, se concentraron ayer en la plaza del ayuntamiento de esta localidad para protestar contra la medida impuesta por la Audiencia Provincial de Asturias. Albert Bordes y Noelia Estornell mostraron su agradecimiento por el apoyo recibido, y destacaron el «aprecio que sentimos de ver a tanto gente que está con nosotros». Pero, al mismo tiempo, mostraron su pesar ante la cercanía del momento en el que tendrán que separarse del pequeño de cuatro años que les tenía a ellos como familia de adopción. El matrimonio recordó que la sentencia de la Audiencia Provincial que les obliga a entregar hoy en un cuartel de la Guardia Civil al menor está recurrida y que el Supremo todavía no ha dictaminado de forma definitiva sobre el caso. La pareja presentó el viernes una demanda solicitando medidas en interés del menor en el Juzgado n.º 7 de Oviedo para paralizar la entrega del pequeño a su progenitora natural, pero la petición no ha sido atendida.