Pagar 42 euros al mes por usar el centro deportivo público del Grau de Gandia, o 330 euros por los once meses al año que está abierta esta instalación, no son, precisamente, precios populares. De ahí que numerosos usuarios que esta semana han accedido al recinto, coincidiendo con su reapertura tras meses cerrado, hayan expresado su malestar por esas tarifas, que han experimentado un enorme incremento respecto a la temporada anterior.

El Gobierno local, en boca de la concejala de Deportes, Lydia Morant, expresaba que, si bien es cierto que se trata de tarifas muy por encima de la media, hay que tener en cuenta que con esos pases los usuarios aceden a tres servicios. La piscina cubierta climatizada, el gimnasio y otras actividades que se desarrollan allí.

El problema, por lo tanto, es que el ayuntamiento, a diferencia de lo que ocurría antes, no ha previsto «separar» esas instalaciones, de manera que un usuario que quiera nadar en la piscina tiene que pagar lo mismo que otro que disfrute de todos los servicios del centro deportivo.

Picornell asume las quejas

A partir de las quejas, eso se va a analizar. El concejal presidente de la Junta de Distrito del Grau, Miguel Ángel Picornell, señaló que ha propuesto al Gobierno local que separe la piscina del gimnasio y que se apliquen tarifas diferenciadas para cada uno de los servicios. Así, con toda seguridad, se reduciría el coste para la mayoría de usuarios.

Según indicaron fuentes municipales, la cuestión ahora es saber si alguna empresa estará dispuesta a gestionar las instalaciones si se aplica esa «separación» que Picornell ha planteado. De no ser así, el ayuntamiento considera que tendría que mantener los precios del «pack» indivisible que han generado las quejas porque, además, el Plan de Ajuste Económico que está obligado a cumplir fija que los servicios públicos de ese tipo se tienen que autofinanciar. Dice el Gobierno local que si no hay «separación» de instalaciones y se mantienen los precios que algunos consideran «abusivos». los graueros pueden usar las dos piscinas cubiertas del polideportivo municipal, situado junto al estadio Guillermo Olagüe, pero el concejal Picornell señala que para personas mayores o que sufren algún tipo de discapacidad es muy molesto, cuando no imposible desplazarse desde el distrito marítimo.