Tras la tromba de granizo del viernes por la noche ayer era el momento de empezar a valorar daños. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA) cifró en torno a diez millones de euros las pérdidas ocasionadas por el pedrisco en la Ribera y Requena-Utiel.

Las cifras ofrecidas por las principales organizaciones agrarias sobre la superficie afectada varían sustancialmente aunque no hay duda de que los principales daños se localizan en la Ribera Baixa y, en particular, en los términos municipales de Favara y Llaurí, como ya informó Levante-EMV. Fuentes de la Unió de Llauradors detallaron que en esta zona se han detectado parcelas con un nivel de afección de hasta el 75 % de la cosecha. Los cítricos son en este caso el cultivo más afectado. El informe elaborado por técnicos de la Unió cuantifica en 628 hectáreas, de las que 614 corresponden a cítricos y sólo 14 a caquis, la superficie afectada por el pedrisco en la Ribera Baixa y, en particular, en los términos de Favara, Llaurí y Corbera.

AVA, por su parte, desplaza ligeramente la zona afectada hasta el triángulo que conforman los términos de Tavernes, Cullera, Favara y Llaurí y valora en seis millones de euros las pérdidas provocadas por el granizo en esta área. Fuentes de la asociación elevaron a unas 2.000 hectáreas la superficie de cultivo afectada en la Ribera Baixa „2.500 si se incluye también el término de Tavernes-„y en la que se concentrarían los principales daños de la provincia ya que, de una valoración total de pérdidas de diez millones de euros, seis corresponderían a esta zona.

La Plana de Utiel-Requena es otra comarca especialmente castigada por el granizo, cuyo tamaño llegó a alcanzar la dimensión de una pelota de tenis en la franja comprendida entre Fuenterrobles, Jaraguas y Caudete de las Fuentes. En medio de la vendimia, a falta de pocos días para la recolección de uva, AVA calcula unas pérdidas de dos millones de euros en una superficie cercana a 800 hectáreas. El nivel medio de afección se sitúa en torno al 70 % de la cosecha, aunque algunas parcelas quedaron arrasadas.