El Ayuntamiento de la Pobla de Vallbona ha aprobado una rebaja del tipo impositivo del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) con el objetivo de congelar el recibo que pagarán los vecinos durante el año 2017.

Para ello, el consistorio ha acordado reducir el coeficiente del 0,50 al 0,46 % para así compensar la subida marcada por la revisión catastral que se hizo al municipìo y que se empezó a aplicar de manera progresiva desde 2012. De este modo, pretenden evitar el incremento del precio a pagar por parte de los vecinos, que según estiman podría suponer alrededor de medio millón de euros en total. Según las cuentas del equipo de gobierno de la Pobla de Vallbona, las arcas municipales ingresarán por el IBI 5.717.000 euros en 2017, 13.620 menos que este año.

La concejala de Hacienda, Iris Marco, explicó que esta medida permitirá al ayuntamiento «mantener unos ingresos similares a los de años anteriores y poder garantizar la prestación de servicios públicos». «Mientras la situación económica no mejore y el paro y la precariedad laboral continúen, el ayuntamiento mantendrá esta congelación de los impuestos. No queremos incrementar la carga fiscal de los vecinos», añadió.