El ya exjefe de la Policía Local de Chiva, que anteayer fue suspendido de empleo y sueldo por seis meses por parte del alcalde del municipio, Emilio Morales, presentó una denuncia ante el ayuntamiento en enero del año pasado en la que acusaba a este último de «hostigamiento y conducta abusiva hacia él».

En el escrito, dirigido al propio alcalde para que se abriera expediente informativo en la Junta de Salud y Seguridad en el Trabajo „algo que, según ha podido saber este diario, no se hizo„, el entonces responsable de la Policía acusaba a Morales de la «retirada injustificada de un vehículo oficial adscrito a la jefatura del cuerpo, «injerencias en el ejercicio de la autoridad», «recriminación sin fundamento» de su gestión, «manifestaciones contra su dignidad personal» o la modificación sin justificación de su horario y jornada de trabajo, entre otros.

Asimismo, en la misma misiva, el exresponsable policial advertía de un supuesto detonante para que se produjera esta actitud. Según denuncia, el alcalde le invitó a no sancionar a determinados establecimientos pese a que incumplían la ordenanza municipal de la instalación de terrazas con finalidad lucrativa en la vía pública. Algo a lo que, al parecer, el agente se negó.

Por su parte, Emilio Morales explicó ayer a Levante-EMV que recibió aquel escrito como «algo informativo» e insistió en que «jamás» ha acosado a nadie: «Si él lo considera así, debería haber puesto una denuncia en el juzgado». Por último, aseguró que la destitución del jefe de Policía obedece a «temas profesionales».