El Ayuntamiento de Riba-roja de Túria ha solicitado a la Conselleria de Cultura que declare como museo las dependencias que albergan una colección de cerámicas de los siglos XIV, XV y XVI ubicadas en el interior del castillo árabe. La petición municipal ha sido aprobada por unanimidad de todos los partidos presentes en la corporación local „incluida la oposición (PP, Ciudadanos y Riba-roja Pot)„ a instancias del equipo de gobierno formado por el PSPV, Compromís y Esquerra Unida.

La demanda del consistorio tiene como principal objetivo incluir estas instalaciones del castillo en el circuito de museos de la Generalitat que dan acceso a las inversiones públicas y, por tanto, capacidad para su mantenimiento, mejora e incremento de su promoción turística. La sala gótica que alberga el museo ocupa una superficie total de 74,8 metros cuadrados situadas en la primera planta del castillo.

El hallazgo de la colección de cerámicas fue posible en 2004 a raíz de las obras de restauración que se llevaron a cabo en el interior de este castillo, adquirido por el ayuntamiento en 1988 por un montante de 30.000 euros, y que supusieron una inversión global cercana a los 1'5 millones de euros, aportados en un 90 % a través del denominado Plan Zapatero, con cargo al 1 % de los fondos destinados a la promoción de la cultura.

La localización de estas piezas se produjo por el hundimiento de una superficie de un ala lateral ya que la parte inferior se hallaba hueca por la presencia de un depósito con una capacidad para almacenar más de 1.000 litros de aceite o vino de la época. Buena parte de las piezas históricas halladas en las tareas de reconstrucción se utilizaban en la época como vajilla o, incluso, como elementos constructivos.

Los estudios históricos posteriores consideran que este depósito era una de los motores económicos existentes de este periodo en el interior de la fortaleza. Tras localizar y restaurar cada una de las piezas de cerámica durante un periodo de más de un año, se ubicaron en la denominada sala gótica que forma parte del futuro museo municipal.

La declaración de la sala del castillo destinada a la cerámica árabe como museo municipal permitirá en un futuro promocionar en el exterior de la localidad la riqueza y el patrimonio que en el castillo de Riba-roja existe actualmente de forma que se incremente el sector turístico. Además, se accederán a numerosas subvenciones y ayudas públicas que de otra forma no es posible.