La Guardia Civil, dentro del marco de la operación denominada ´GOS´ detuvo a una persona por delito de maltrato animal a una perra de raza mestiva en Chiva. El cachorro, de aproximadamente un año de edad, es Nina. Una perra que fue rescatada el pasado 19 de abril por la Policía Local y la Benemérita, después de tener conocimiento del posible maltrato al que el dueño estaba sometiendo a su mascota, a la que mantenía encerrada en un baño. El presunto autor de los hechos es un varón de 43 años de nacionalidad española. El can presentaba una fractura abierta de mandíbula y lesiones irreversibles en un ojo, así como síntomas de desnutrición.

?El animal fue intervenido quirúrjicamente debido a las secuelas de los malos tratos que sufría, habiendo perdido el ojo afectado. Aunque la mandíbula si pudo ser reconstruída, facilitando que el can pueda alimentarse de forma autónoma. No obstante, la perra presentaba indicios de muchas fobias y temores debido al continuo maltrato originado por su dueño. Además, tras realizar una exploración médica se constató que también tiene daños en el hígado y en los riñones, y alopecia.

?La vida de esta cachorro cambió gracias al aviso de unos vecinos de Chiva. Estos alertaron a la Policía al escuchar los continuos lloros y lamentos del animal. Además, sospechaban de que no estaba en buenas condiciones desde hace tiempo.

?El día del rescate, se tuvo que poner goteros a la perra, puesto que no podía alimentarse por sí misma. En esa misma jornada fue operada de las afecciones que padecía en la mandíbula, soportando los efectos de la anestesia y extirpándole el ojo del que sufría una enucleación.

El Ayuntamiento implicado

«No sabemos cómo sigue viva; no publicamos los vídeos del estado en la que la encontraron porque son muy fuertes», explicaba Cristina Suárez, presidenta de la protectora y concejala de Chiva. «Es muy doloroso», aseguró; «es una perrita encantadora, que ha pasado de estar agresiva a dar besitos al ver que la cuidamos», apuntó.