"Queremos que se moje la diputación". Así de contundente se mostró el alcalde de Pedralba, Roberto Serigó, ante la paralización ya durante 20 meses del proyecto de la variante sur, que debería desviar el tráfico pesado del casco urbano de este municipio. Esta obra fue proyectada y adjudicada por la administración provincial, pero la Conselleria de Medio Ambiente la paralizó por posibles afectaciones al Parc Natural del Túria. Serigó responde así después de que recientemente Elena Cebrián, la consellera de dicha área, asegurara en las Corts que su departamento ya ha realizado los pasos necesarios para desbloquear la situación, y que la diputación no lo ha hecho todavía.
El proyecto de la variante sur de Pedralba fue diseñado por los técnicos de la Diputación de València. De hecho, Serigó siempre ha insistido en defensa de este plan que «es una carretera hecha por técnicos, no por políticos». Fue la propia diputación la que aprobó y adjudicó las obras del proyecto. Y parecía que no había mayores problemas para su ejecución cuando en febrero del año pasado la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, aprobó la expropiación urgente de los terrenos para poder comenzar con los trabajos. Tan solo unas horas después, el director general de Medi Natural, Toni Marzo (Compromís), instaba a la diputación a paralizar temporalmente la variante tras alegar que su trayecto afectaba al Parc Natural del Túria. Además, emplazaba a buscar alternativas, que desde la diputación siempre han considerado excesivamente caras.
La paralización de la variante, además, podría provocar que la adjudicataria reclamara el lucro cesante por los beneficios que dejaría de obtener por no poder realizar la obra. Fuentes de la diputación calculaban que la cifra podría superar los 300.000 euros, ante lo que la administración provincial ya avisó de que estaría dispuesta a denunciar a la misma Generalitat... pese a que ambas instituciones están encabezadas por el PSPV.
Por otra parte se encuentran los propietarios de los terrenos a expropiar que, según explicó Serigó, ya han presentado un requerimiento a la diputación para que les pague la ocupación de las parcelas, a lo que, de momento, han respondido mediante el silencio administrativo.
Y mientras tanto, alrededor de 1.500 vehículos al día circulan por las estrechas calles Acequia y Colón de Pedralba provocando numerosísimas molestias a los vecinos, que se dividen entre los que quieren la variante sur a toda costa y los que desean el desvío, "pero no por el río".
