El problema de las toallitas húmedas, que no se degradan en contacto con el agua, ha llegado a Tavernes de la Valldigna. Hidraqua, que se encarga de la gestión del ciclo del agua, ha tenido que levantar parte de una calle para desatascar una tubería donde la acumulación de estos elementos había creado un colapso de importantes dimensiones.

Alrededor de 70 kilos de toallitas han sido retiradas en una actuación que ha tenido un coste para la empresa de más de 3.000 euros, además de las molestias generadas a los vecinos al tener que cortar la calle Ombría, una de las vías que da acceso al paseo Colon y a toda la zona residencial del Vergeret desde la CV-50.