Técnicos de la Diputación de Valencia revisan el sistema de impermeabilización del túnel de Cortes de Pallás después de que una parte importante de la lámina se desprendiera el pasado domingo por efecto del viento, con el fin de determinar si refuerzan los anclajes o instalan otro sistema.

El director de Carreteras de la Diputación, Javier Piedra, explicó que, en una jornada de alerta por viento de 100 kilómetros por hora, al parecer se produjo un efecto de concentración de viento en el túnel, lo que provocó que la lámina se soltara y obligó a cortar el tráfico durante una hora. Se retiraron unos 100 metros lineales de lámina impermeable y se reabrió el túnel, que estaba siendo objeto de mejora por parte de la diputación, con una inversión conjunta de 1,44 millones de euros en el túnel de la CV-428 (en la carretera CV-425 a Cortes de Pallás) y la carretera de acceso.

En el túnel, que data de los años 80 del siglo pasado, se estaban acabando los remates de una obra por la que se ha impermeabilizado la cubierta con un sistema estándar y se ha mejorado la iluminación, dentro del proyecto de acondicionamiento de la carretera que culmina las mejoras puestas en marcha a raíz de las fuertes lluvias que provocaron el desprendimiento de la ladera y dejaron incomunicado al municipio en 2015.

Según Piedra, se recubrió el túnel con una lámina de polietileno para que no se produjesen filtraciones de la montaña a la carretera, si bien hasta ahora el túnel ha estado con la cubierta en roca viva.