La Unió de Llauradors ha pedido al Ministerio de Agricultura que prohíba la importación de jabalíes procedentes de Hungría ante el riesgo de que estén infectados por la peste porcina africana. Y ¿por qué están llegando estos animales a España y, concretamente, a la Comunitat Valenciana? Al parecer, según denuncia La Unió, para uso cinegético. Es decir, para cazarlos. El mismo sindicato agrario asegura que se ha confirmado la presencia de peste porcina africana en países limítrofes con Hungría, por lo que la entrada de estos jabalíes en territorio español podría conllevar un «grave riesgo sanitario».

El propio Ministerio de Agricultura confirmó durante el último encuentro de Porciforum en Lleida que en España ya se están importando estos jabalíes procedentes de Hungría. Es más, La Unió asegura que tiene constancia de que algún coto de la Comunitat Valenciana lo está haciendo, aunque, según critican, «por precaución y responsabilidad no debería hacerlo». «En nuestra comunidad autónoma existe una sobrepoblación de fauna salvaje en general y en concreto de jabalíes que, aparte de daños en los cultivos, están provocando graves accidentes en las carreteras durante los últimos tiempo y, por tanto, no tiene sentido que se importen con ese peligro sanitario», incidió en un comunicado La Unió de Llauradors.

La presencia de la peste porcina africana ya ha sido constatada en países de la Unión Europea como Polonia, Letonia, Estonia, Rumanía y la República Checa, y en otros del este de Europa fuera del ámbito comunitario como Rusia, Bielorrusia, Moldavia o Ucrania. Algunos de esos países tienen frontera con Hungría, por lo que La Unió ha advertido del riesgo real de que se pueda haber propagado la enfermedad al país magiar.

Según fuentes del sindicato, el ministerio habría respondido que «no resulta posible prohibir la importación de jabalíes de Hungría al estar dicho país fuera de estas zonas de protección y vigilancia».

«Capricho de cuatro»

El sindicato agrario recordó la importancia del sector porcino en la Comunitat Valenciana, con 231 millones de euros de facturación que supusieron el 7 % de la producción agraria valenciana en 2016. «No podemos poner en peligro nuestro sector porcino por el capricho de cuatro a los que los millones de jabalíes que tenemos aquí no les parecen suficientemente grandes para cazarlos», criticó su secretario general, Ramón Mampel.