La Conselleria de Medio Ambiente ha adjudicado los primeros trabajos de redacción de varios proyectos sobre la restauración ambiental de las zonas afectadas por los devastadores incendios que asolaron en 2012 los términos municipales de Andilla, Alcublas y Cortes de Pallás, entre otras localidades. De este modo, se da inicio a un plan para que la zona trate de recuperar su valor ecológico en los próximos años, si bien se trata todavía, según indicaron fuentes de la conselleria, de los primeros pasos para ello.
En concreto, según explicaron las mismas fuentes, estos trabajos incluirían actuaciones para corregir hiperdensidades de arbolado, además de la restauración ambiental de los bosques mediante especies autóctonas y otras que sirvan de reclamo para que la fauna vuelva a habitar esta amplia área del interior de la Comunitat Valenciana. Este primer contrato ha sido adjudicado por un importe neto de 287.480 euros, que asciende a los 347.851 con el IVA incluido.
Hasta el momento se había dejado ver cómo evolucionaba el terreno tras el desastre en el que el fuego se llevó por delante un total de 48.500 hectáreas. Ahora, ya pasados unos años y visto el desarrollo forestal que ha tenido lugar de forma natural, la Conselleria de Medio Ambiente ya se prepara para actuar próximamente con la redacción de estos proyectos de restauración ambiental.
Fue a finales del mes de junio de 2012 cuando el fuego se convirtió en una pesadilla de enormes dimensiones para los vecinos del interior de la Comunitat Valenciana -e incluso también para los del litoral-. Durante varios días las cenizas y la humareda llegaron a alcanzar el litoral de la provincia de València, mientras los bosques de sobre todo Andilla, Alcublas y Cortes de Pallás ardían. En las labores de extinción llegó a fallecer el piloto de un helicóptero que se estrelló en el embalse de Forata, e incluso en algunos momentos se temió que el fuego pudiera alcanzar la central nuclear de Cofrentes, aunque por fortuna no lo hizo.
El incendio afectó a más de una veintena de municipios valencianos entre los que se encontraban también Dos Aguas, Yátova, Macastre, Alborache, Turís, Real, Montroy, Llombai, Catadau, Carlet, Tous, Llíria, Marines, Altura, Sacañet, Teresa, Bejís, Jérica o Viver.
