Los accidentes en los que se han visto implicadas pequeñas aeronaves en la Comunitat Valenciana han dejado como triste balance un muerto y cuatro heridos en los últimos seis meses.

A finales de diciembre de 2017, el piloto de un ultraligero resultó herido de gravedad en Mutxamel cuando su aeronave chocó contra un helicóptero de la Generalitat Valenciana que volvía de realizar tareas de extinción de incendios. En enero de este año, un hombre falleció y otro resulto herido grave en el accidente de otro ultraligero pero en este caso en la localidad castellonense de la Pobla de Benifassà. Los dos heridos de la avioneta de Requena cierran el balance de afectados en medio año.