La Guardia Civil ha detenido a dos menores y mantiene bajo investigación a otros 21, además de cuatro adultos, por haber cometido diversos robos con fuerza y hurtos en Buñol en los que se aprovechaban de sus habilidades para realizar parkour, una modalidad deportiva consistente en la realización de saltos acrobáticos sobre el mobiliario urbano. Al parecer, gracias a su agilidad podían lograr acceder a los hogares donde efectuaban los robos.

La investigación fue iniciada por el Puesto de Buñol de la Guardia Civil a finales del año pasado, cuando observaron que se habían denunciado diversos robos con fuerza y hurtos en viviendas de la localidad. Fruto de la pesquisas, los agentes comprobaron que había dos grupos diferenciados que estaban llevando a cabo los delitos. Uno de ellos los realizaba mediante el método del escalo y el otro, mediante fractura del bombín. Y en ambos había una coincidencia, que algunos de los ladrones empleaban sus habilidades para realizar parkour para llegar hasta las casas.

Durante la investigación, que se diferenció en dos operaciones denominadas «Parkurs» y «Kurpar», la Guardia Civil pudo determinar la implicación de varios menores en multitud de estos hechos delictivos. En muchos de ellos, los implicados montaban sus propios dispositivos de contravigilancia: mientras unos robaban, otros seguían a las víctimas de sus robos para avisar si estos volvían a casa y que no les sorprendieran in fraganti. Además, también se dedicaban a la compraventa de marihuana en pequeñas dosis que distribuían entre menores de Buñol y alrededores.

La Guardia Civil ha detenido a dos menores por estos hechos, mientras que mantiene a otros 21 y cuatro adultos como investigados con responsabilidad por su supuesta participación como autores en multitud de hechos delictivos como robos con fuerza, hurtos, daños, robos con violencia, amenazas con arma blanca, coacciones, obstrucción a la justicia, tráfico de drogas y receptación.