Maite Ducajú, Valencia

Las objeciones del profesorado al modelo valenciano de la asignatura de Educación para la Ciudadanía y los derechos Humanos, en inglés y con la opción de aprobar sin asistir a sus clases, no se han hecho esperar. Apenas publicada la orden del Consell que regula la materia, los claustros de profesores están valorando, al finalizar este curso, si aplicarán en el 2008-09 la norma a los alumnos de segundo de la ESO tal como está redactada por la Conselleria de Educación. El instituto de Secundaria Ballester Gozalvo de Valencia se coloca como abanderado al da a conocer ayer su acuerdo de rebelión, pero no es el único.

Este periódico ha sabido de diversas fuentes consultadas que otros tantos institutos -Fuente San Luis, Marítimo, ambos de Valencia, o l'Om de Picassent- han tomado similar decisión de no enseñar Ciudadanía más que en las lenguas oficiales (no en inglés) y dar la materia completa, sin permitir que sean los padres o los estudiantes quienes decidan los contenidos del trabajo trimestral.

El claustro de profesores del Ballester Gozalvo aprobó ayer "impartir la asignatura de Educación para la Ciudadanía, únicamente en la opción A y en cualquiera de las lenguas recogidas en nuestra Constitución y en el Estatuto de Autonomía: castellano y valenciano" señala el acuerdo, según informó la Federació d'Ensenyament de CC OO.

Sus profesores "entendemos" que "impartir una asignatura en una lengua extranjera y con un programa elegido por los padres, madres o tutores familiares, en contra de lo establecido en la normativa legal y en nuestro proyecto educativo, puede conculcar no sólo los derechos de los ciudadanos a recibir una educación democrática, sino abocarlos incluso a una situación en la que el Estado Español no reconociera los títulos de Educación Secundaria Obligatoria, según establece el Real Decreto 1631/2006 de 29 de diciembre por el que se regulan las enseñanzas mínimas correspondientes a esta etapa", indica el texto aprobado por este centro que se repartirá junto a los sobres de la matrícula.

Tras conocer la decisión, fuentes de la Conselleria de Educación contestaron a preguntas de Levante-EMV que "los claustros de los institutos no son independientes del sistema educativo valenciano y tiene que atenerse a las normas que, en este caso, son impartir la opción A en inglés -y no es opcional en otra lengua- y, si hay alumnos que piden la B, tendrán que atenderles, según recoge el modelo de la conselleria que es el que sirve para obtener el título de ESO y no el modelo del Ministerio de Educación".

Por su parte, los responsables de la Asociación de Directores de Educación Secundaria ha redactado un texto para enviarlo a sus asociados en el que recuerda que su asamblea valoró en su día negativamente la decisión de la conselleria sobre esta materia. La organización añade que "atendiendo el nuevo marco legal, vamos a pedir a las organizaciones sindicales interpretación jurídica sobre la orden que regula la asignatura para que nuestras actuaciones como directores se ajusten a la legalidad vigente y no generen inseguridad jurídica no a los usuarios ni a los equipos directivos".

Desde CC OO se "ánima a todos los centros docentes a reivindicar el cumplimiento del decreto de desarrollo curricular de Secundaria en los términos del Ballester Gozalvo".