Noemí Oms, Peñíscola

El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) ha anulado un proyecto urbanístico en Peñíscola que contemplaba la construcción de más de 300 viviendas en un sector "inundable" y que fue aprobado por el ayuntamiento en 2003 y avalado posteriormente por la Comisión Territorial de Urbanismo en mayo de 2004.La sentencia, dictada el pasado día 2 de septiembre de 2008, la dio a conocer ayer la asociación de vecinos Camí Vell, colectivo que tras cinco años de peleas judiciales ha logrado frenar el denominado Plan de Reforma Interior (PRI) delimitado por las calles N-26, N-17, N-36 y la avenida Papa Luna.

El fallo judicial es muy claro al declarar que la zona en cuestión está efectivamente afectada por el Plan de Acción Territorial de Riesgos de Inundación (Patricova) de la Generalitat. En este sentido, destaca la afección de drenajes al mar desde los barrancos Moles y Mongells, apuntando al respecto que es un sector inundable.

La sentencia emitida por el TSJCV determina que "no se han adoptado ninguna de las medidas previstas, pues ni se ha realizado el estudio de inundabilidad, ni las correspondientes actuaciones de drenaje, ni en definitiva consta que se haya efectuado estudio alguno de la incidencia de riesgo de inundación en la zona y la consecuente adecuación del planeamiento". En consecuencia, en el fallo se declaran "los citados actos contrarios a derecho, anulándolos y dejándolos sin efecto". La sentencia, según señaló el portavoz de Camí Vell, Ezequiel Llorach, es firme y la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda ya ha ordenado su ejecución a los servicios territoriales en Castelló.

El proyecto urbanístico se aprobó de forma provisional por el Ayuntamiento de Peñíscola el 25 de septiembre de 2003 y de forma definitiva el 18 de noviembre de 2004, mientras que la Comisión Territorial de Urbanismo de Castellón avaló todas estas actuación el 4 de mayo de 2004. Desde la entidad vecinal aseguran que "muchos de los que ejercen funciones en el ámbito urbanístico de Peñíscola en la actualidad, tanto técnicos como políticos, aprobaron activa o pasivamente este proyecto sin tener en cuenta la inundabilidad", por lo que consideran los vecinos que "éstas personas pusieron en peligro la vida y los bienes de terceros que hubieran podido adquirir sus inmuebles en esta zona inundable".

Ezequiel Llorach lamentó que "éstas mismas personas son las que ahora pretenden aprobar un Plan General de Ordenación Urbana según una ley, la LRAU, derogada hace más de tres años", por lo que apuntan que "algo falla en el urbanismo en Peñíscola".

Responsabilidades políticas

Para la asociación de vecinos la resolución del tribunal pone de relieve que "ninguna administración posee carta blanca sino que existen unas reglas que deben ser respetadas por todos". Del mismo modo, consideran que "el Ayuntamiento de Peñíscola debe extraer las consecuencias lógicas de lo anterior respecto a la tramitación del Plan General" y exigen, tras conocer la sentencia, "que se asuman las responsabilidades políticas oportunas", así como la "apertura de expediente a los técnicos que participaron en este proyecto para depurar sus responsabilidades".

Los vecinos de Camí Vell recordaron para concluir que si la entidad no llega a presentar la denuncia, el plan hubiera salido adelante.