A. G., Valencia

El nuevo arzobispo de Valencia, Carlos Osoro, ya ha elegido hombre de confianza. Ese es el papel que ejercen los secretarios personales de los obispos en la Iglesia moderna. El de Osoro será Álvaro Almenar, actual párroco de La Pobla del Duc, Beniatjar y Ràfol de Salem (tres municipios de la Vall d'Albaida). El nombramiento se hará oficial en los próximo días, pero ya es público entre la curia valenciana. Desde su llegada a la diócesis el pasado día 18, el nuevo arzobispo había tenido como secretario provisional a José Pérez Leal.

Álvaro Almenar (Valencia, 1973) se formó en el Seminario de Moncada, hasta que se ordenó como sacerdote en 2001. Antes de acceder a la vida clerical inició la carrera de Derecho, que abandonó para ingresar después en una academia de bomberos. Fue en el servicio militar (en Cartagena) donde más clara oyó la llamada del sacerdocio. Lo relataba él mismo en una carta que escribió con motivo del Día del Seminario de 2001.

Almenar, hijo de un cardiólogo valenciano, ejerció como párroco en algunos destinos de Requena-Utiel, como Los Isidros y Los Pedrones (fue también capellán del hospital comarcal), antes de llegar a La Pobla del Duc. No es un sacerdote especialmente conocido entre el clero valenciano -es joven y lleva sólo ocho años como cura-, aunque algunos clérigos consultados lo definían ayer como "un hombre de fe". Según otras fuentes, está vinculado al Camino Neocatecumenal (los popularmente conocidos como kikos).

Álvaro Almenar asume el puesto que dejó Antonio Corbí, quien fue la fiel mano derecha del cardenal Agustín García-Gasco durante su mandato. Este le nombró director del Instituto Diocesano de Estudios Canónicos en 2007.