Con el lema "Una grande libre", el águila de San Juan, y el yugo y las flechas, un enorme escudo franquista de piedra ha coronado durante años la entrada principal del Hospital Militar de Valencia, ubicado en Quart de Poblet. Hasta ayer. El Ministerio de Defensa ordenó la retirada del emblema para cumplir con la Ley de Memoria Histórica que, entre otros aspecto,establece la eliminación de la simbología fascista de la vía y los edificios públicos. Ahora, la exigencia de asociaciones como la fundación socialista Societat i Progrés o el Fòrum per la Memòria es "que cunda el ejemplo".

Para el coordinador del Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica de la Fundació Societat i Progrés, Matías Alonso, la retirada del escudo franquista "no es más que el cumplimiento de la ley", algo que "sí está haciendo el Gobierno central, y que debería hacer el Ayuntamiento de Valencia que, sin embargo, parece tener, más bien, una voluntad obstruccionista al respecto".

Alonso basa esta acusación en la existencia de entre 50 y 60 calles de la capital con una nomenclatura propia del franquismo -o de personas afines al régimen-, además de la existencia de escudos y emblemas en el CP Teodoro Llorente, en un edificio del arzobispado del barrio de Patraix y en varias iglesias como la de Santo Domingo, la de la Santa Cruz o la ermita de Soternes.

Capitanía, pendiente

Desde Fòrum per la Memoria, quisieron recordarle al Ministerio de Defensa que ahora "le queda el edificio de Capitanía, que además del escudo, cuenta con la estatua de Franco que se quitó de la plaza del Ayuntamiento". Por ello, exigieron que la simbología franquista "se destruya y no se guarde en los cuarteles a modo de exposición".

La historia se hace en un váter de la cárcel

Los historiadores de la Comissió de la Veritat que impulsa Acció Cultural presentarán este viernes en un congreso de dos días, que tendrá lugar en el Centre Octubre de Valencia, los resultados de las investigaciones que han realizado durante los dos últimos años sobre la represión franquista en la C.Valenciana. Ricard Camil Torres, codirector del congreso y profesor de la Universitat, explicó ayer que la Comissió lleva un año y medio catalogando los 80.000 expedientes de presos y presas políticas de la dictadura que se guardan en la prisión de Picassent. Torres, que avanzó que Franco encarceló "a más de 3.000 mujeres sólo en la provincia de Valencia frente a las 1.280 presas políticas que hubo en las cárceles de la capital durante la Guerra Civil", denunció los "obstáculos" que se han encontrado para poder acceder a estos documentos históricos, ya que se han visto obligados a estudiarlos "en un váter de la cárcel, sobre una sillita y una mesa en la que se te pegaban los brazos de sucia que estaba". rafel montaner valencia