En la Comunitat Valenciana viven 813.214 personas mayores de 65 años, un 16% del total de la población. Sin embargo, la cobertura de los servicios sociales para este colectivo en nuestra autonomía no es una referencia para el resto de España, sino más bien al contrario, ya que la Comunidad se encuentra por debajo de la media en todos los indicadores recogidos en un informe del Imserso (Instituto de Mayores y Servicios Sociales), recientemente publicado, en el que se analizan los servicios de ayuda a domicilio, de teleasistencia, los centros de día y los centros residenciales.

El "Informe 2008. Las personas mayores en España" refleja que la cobertura es especialmente deficitaria en el servicio de ayuda a domicilio -donde la Comunitat Valenciana se encuentra en el puesto 17, es decir, la tercera por la cola y sólo supera a Murcia y Galicia- y en la atención que se presta en residencias, donde ocupa el puesto 14, el sexto por la cola.

En el primero de los casos, con 22.305 usuarios atendidos en el servicio de ayuda a domicilio, el índice de cobertura es del 2,74 -lo que significa que la Comunitat dispone de 2,74 plazas por cada 100 personas mayores- mientras que la media en España es de casi el doble, 4,69, y hay comunidades como Extremadura donde se alcanza el 9,90 o el 9,58 de Ceuta. Respecto a la intensidad horaria -el número de horas de atención al mes por usuario- también es la tercera más baja del país, con 10,80 horas al mes por persona, cuando la media es de casi 17 horas.

En los servicios residenciales, con 26.321 plazas, la media de cobertura es de 3,24 plazas por cada 100 habitantes, cuando la media nacional es de 4,44.

La cobertura en el servicio de teleasistencia, con 29.537 usuarios atendidos, es del 3,63 -la media en España es del 4,72 y en la Comunidad de Madrid, por ejemplo, es del 11,94-. Por último, el índice de cobertura en la atención de centros de día, con 6.929 personas atendidas, es del 0,66 -la media nacional es 0,83- y, pese a que este indicador es el mejor que registra la Comunidad, aun así es menor que el recogido en el informe de 2006, con 0,75, siendo la segunda autonomía con mejor cobertura en este apartado.

El informe destaca no obstante el incremento cuantitativo experimentado en la oferta de servicios sociales a mayores en casi todas las autonomías respecto al año 2002. En seis años, la Comunidad ha duplicado los usuarios atendidos en el servicio de ayuda a domicilio, con 9.000 personas más; ha multiplicado por cuatro la atención en centros de día, que en 2002 era de 1.500 personas; ha duplicado las plazas de centros residenciales y los usuarios atendidos por teleasistencia. El aumento, sin embargo, es menor que la media en España.

La tercera edad crece un 13% en los últimos seis años

La Comunitat Valenciana es la autonomía que ha registrado un mayor incremento en la cifra de personas mayores de 65 años en los últimos seis años, según el informe del Imserso. En términos absolutos, entre 2002 y 2008, la población empadronada del colectivo de la tercera edad ha aumentado en 92.975 personas, la mayor cifra del país, seguida de Andalucía, con 85.342 personas; la Comunidad de Madrid, con 82.411, y Cataluña, con 66.309. Ello significa que la población mayor ha crecido en la Comunidad Valenciana un 13% desde el año 2002, la segunda con mayor incremento, superada sólo por Canarias, con un 19,3% de aumento, mientras otras comunidades como Aragón, Asturias o Extremadura han registrado crecimientos negativos en este colectivo. En los últimos dos años, entre 2006 y 2008, la población mayor en la Comunidad ha crecido en 33.000 personas. En la provincia de Alicante, uno de cuatro mayores es ya extranjero.

La distribución de los usuarios de los servicios sociales objeto de estudio del Imserso muestra un predominio de usuarias mujeres en todos los servicios: el 67% en Servicio de Ayuda a domicilio; el 76% en teleasistencia; el 71% en centros de día y un 66% en centros residenciales. Respecto a la edad del usuario, los mayores de 80 años representan el 59% en centros de día y teleasistencia; el 62% en centros residenciales y la mitad en el servicio de ayuda a domicilio.