El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) tiene previsto enviar una inspección a la central de Cofrentes (Valencia) para analizar las causas y la evolución del suceso ocurrido ayer, el cual ha clasificado, de forma preliminar, con nivel 1 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES).

Según ha informado hoy el CSN, el suceso, que no ha supuesto riesgo para los trabajadores, la población ni el medio ambiente, se debió al desprendimiento de un sub-elemento de combustible que se estaba inspeccionando y cayó verticalmente sobre la plataforma de la máquina de inspección, desde una altura de unos 10 centímetros.

Posteriormente, ha detallado el CSN, pivotó sobre su parte inferior apoyándose en la pared de la piscina de combustible y resbaló hasta quedar en posición horizontal sobre los "racks" de los elementos de combustible almacenados en la piscina.

Este suceso fue notificado ayer por el titular de la central nuclear de Cofrentes.

El Consejo tiene previsto enviar una "inspección reactiva" a la instalación para, además de estudiar las causas y evolución del incidente, analizar las medidas que debe adoptar el titular.

La planta de Cofrentes ya ha completado el 40 por ciento de los trabajos programados con motivo de la decimoséptima recarga de combustible de la planta, que se lleva a cabo desde el pasado día 6 de septiembre.

El suceso ha sido clasificado como de nivel 1 en la escala INES; esta clasificación, a la que España se sumó en 1990, clasifica cada suceso en una escala del 0 al 7 teniendo en cuenta tres criterios: el impacto fuera del emplazamiento, el impacto en el emplazamiento y la degradación de la defensa en profundidad.

Los sucesos correspondientes a los niveles bajos (1 a 3) se denominan "incidentes", y los más altos (4 a 7) "accidentes".