Cuatro de los cinco políticos madrileños imputados en la trama "Gürtel" (los diputados regionales López Viejo, Bosch, Martín Vasco y el ex alcalde de Pozuelo, Jesús Sepúlveda) renunciaron hoy formalmente a estar adscritos al PP, y el quinto, González Panero, será expulsado si no lo ha hecho el próximo martes.

Jesús Sepúlveda es el único de los cinco implicados que ha renunciado también a su acta de concejal, en tanto que los tres diputados de la Asamblea de Madrid han decidido conservar el escaño, si bien esta misma mañana han renunciado "voluntariamente" a formar parte del grupo parlamentario "popular" y a beneficiarse de las "subvenciones, ayudas económicas" y otras prebendas inherentes al cargo.

En el caso de Sepúlveda ha acudido hoy al registro del Ayuntamiento de Pozuelo para renunciar a su acta de concejal por el PP, cargo en el que será sustituido por Carmen Hurtado, según han informado fuentes municipales.

El quinto implicado en la trama, el ex alcalde de Boadilla del Monte, Arturo González Panero, no ha acudido hoy al Ayuntamiento ni para formalizar su baja en el grupo municipal del PP -como dijo ayer que haría- ni para acudir al Pleno que se ha celebrado esta mañana.

Fuentes del Ayuntamiento han informado a EFE de que el alcalde de Boadilla del Monte, Juan Siguero (PP), expulsará el próximo martes del grupo municipal "popular" a González Panero si para entonces no ha formalizado su baja en el registro.

Estas renuncias se producen a menos de 24 horas de que la presidenta de la Comunidad y del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, anunciara que los cinco miembros de esta formación que estaban imputados en el caso "Gürtel" habían renunciado a pertenecer a esta adscripción política y que los diputados regionales no pensaban renunciar a sus actas.

Esta mañana, en rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Dirección del PP de Madrid, Aguirre ha anunciado que el grupo Parlamentario del PP tramitaría por "vía de urgencia" una reforma reglamentaria para evitar que los tres diputados imputados en "Gürtel" se constituyeran en grupo mixto y se "aprovecharan de las ventajas" que disfrutan los demás parlamentarios autonómicos.

Poco después, el portavoz del PP en la Asamblea, David Pérez, presentaba en el registro una Proposición de Ley para crear la figura del "diputado no adscrito" y para que a López Viejo, a Bosch y a Martín Vasco se les reconozcan "exclusivamente los derechos individuales que les corresponden como Diputados".

Esta proposición será estudiada por la Mesa de la Asamblea el próximo martes, día 13, y el PP de Madrid espera que los grupos parlamentarios la aprueben "por unanimidad", ya que la figura del diputado no adscrito está presente en numerosas Asambleas legislativas autonómicas y también en la legislación de régimen local, a través de los concejales no adscritos.

Por su parte, la presidenta Aguirre afirmaba esta mañana que la actitud que ha mantenido en este caso no debe servir "en absoluto" de ejemplo para el presidente valenciano, Francisco Camps, porque en Madrid "había hasta ayer cinco miembros electos" del partido implicados en "Gürtel" y en Valencia "en este momento no hay nadie imputado" y los que lo estaban "han sido exonerados".

Aguirre se ha confesado especialmente "dolida" con el ex consejero de Deportes de la Comunidad, Alberto López Viejo, porque se ha demostrado que siguió contratando con empresas de la trama, a pesar de que ella le advirtió de que no lo hiciera.

La presidenta, que en las últimas horas no ha hablado de este asunto con el líder del PP, Mariano Rajoy, pero sí lo ha hecho con su "número dos", María Dolores de Cospedal, ha asegurado que mantiene la presunción de inocencia "penal y política" para los cinco ex miembros del PP de Madrid imputados en el caso y que "evidentemente" podrán volver al partido si la Justicia concluyera que son inocentes.