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El presidente provincial del PP en Alicante, José Joaquín Ripoll, propuso ayer que, para afrontar situaciones de "tragedia" como la que a su juicio atraviesa actualmente el PPCV con el caso Gürtel, se cree un "gabinete de crisis" que se reúna cada vez que haya revelaciones del sumario.
Ripoll señaló que ese "gabinete de crisis" podría asumirlo el propio Comité Ejecutivo Regional, que se reuniría "tantas veces como sea necesario" para tomar "decisiones" y separar "una buena gestión del PP valenciano de un caso que afecta personalmente a algunos miembros del partido".
Ripoll exigió, en declaraciones a Onda Cero, a la dirección regional del partido que se deje de "tonterías" y adopte decisiones por el bien de la formación en relación con la implicación de algunos de sus dirigentes en el caso Gürtel, pues este asunto debe tener "consecuencias, aunque algunas sean traumáticas".
Ripoll dijo que en el Comité Ejecutivo , Ricardo Costa hizo una intervención "brillante". "Se nos pidió que no hubiera intervenciones y selláramos el acuerdo con un aplauso", reiteró, para reconocer que él, como otros, no aplaudió.
"Deberíamos ser claros y decir exactamente lo que pensamos", añadió Ripoll, quien reconoce estar "bastante triste" tras la reunión del martes porque se ha intentado "engañar a la gente o no decir lo que vamos a hacer" en el seno del partido, y eso, a su juicio, "es un error que no perdonan los votantes; pueden entender nuestras decisiones, pero no que no les contemos lo que vamos a hacer y en unos sitios contemos unas cosas y en otros, otras".
Preguntado sobre si él hubiera destituido a Costa, respondió: "Creo que las actuaciones más correctas las ha tomado Esperanza Aguirre". Este caso, advirtió, "no puede tener unas consecuencias en una comunidad, y no tenerlas en otra". Preguntado sobre si Camps tiene aún futuro político, Ripoll dijo que el hecho de haberse implicado "personalmente" en el caso Gürtel "siempre condiciona" cualquier carrera política.
"Hay que recuperar el orgullo en el PP"
La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, dijo ayer que el PPCV "ha resuelto la situación" aunque confesó que le preocupa "recuperar sin duda alguna el orgullo de pertenecer al Partido Popular", puesto que "no sé si hemos dado la mejor imagen o no". Barberá afirmó sobre Costa que "el tema está resuelto" y "en los órganos que corresponde". Consideró que "la política es tremendamente dura" y complicada, "pero a nadie le ponen un pistola en el pecho para que entre en política, entramos porque queremos y sabemos que pueden pasar estas cosas", advirtió. "Quizá las cosas no serían las mismas", dijo, si Garzón hubiera mandado al TSJCV, "en su momento", "esos folios de sumario del 6 de marzo, ilegalmente tomadas por cierto, en las que había pruebas exculpatorias respecto al presidente de la Generalitat".
