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Las dos medidas para estimular a los alumnos mejor preparados que ayer presentó Font de Mora estarán acompañadas por otras cinco iniciativas dirigidas, la mayor parte de ellas, a reducir el fracaso escolar. Es decir, enfocadas a los estudiantes con más dificultades o menos interés. La primera de ellas es una batería de diez programas dirigidos a alumnos que se hallan "en condiciones desfavorables desde el punto de vista social, económico, cultural, étnico o personal" a través de la "detección de dificultades, refuerzo, realización de material y formación del profesorado".

La segunda medida consiste en la celebración de cursos preparatorios de las pruebas de acceso a ciclos formativos de grado medio y superior. Por una parte, facilitando que los alumnos sin el título de la ESO puedan enrolarse en la Formación Profesional. Y por otra parte, que gente sin el título de bachiller pueda acceder directamente a ciclos de grado superior.

Una tercera iniciativa buscará rediseñar las pruebas de acceso a la Formación Profesional con el objetivo de "facilitar que la FP sea una oferta educativa amplia". Esto se intentará conseguir mediante "un exhaustivo catálogo de exenciones y convalidaciones por haber superado diferentes materias en otros niveles educativos", explicaron desde la Conselleria de Educación.

Convalidación de FP

La apuesta por la FP se intensifica en otra medida presentada ayer. La conselleria impulsará la concreción de convenios con las universidades de la Comunitat con una finalidad: permitir la convalidación de créditos de las titulaciones universitarias a los alumnos con título de ciclo formativo superior.

La última medida es un Programa Experimental para la Detección de Buenas Prácticas Dirigidas al Éxito Escolar, que se centrará en la educación primaria y la ESO.