?

¿Sospecha que en la gasolinera le echan menos combustible del que paga? Eso creen muchos ciudadanos cuando comparan lo que dura su depósito al cambiar de estación de servicio. Tal vez sea un bulo cibernético, pero ha empezado a circular por internet una denuncia contra las gasolineras por una supuesta estafa extendida. Consistiría en una manipulación de los surtidores, a través de un software trucado en el ordenador de la estación de servicio, que les hace despachar litros menoscabados. Es decir, litros de 900, 850 u 800 mililitros. El resto del combustible se lo ahorraría la gasolinera sin enterarse el consumidor.

Al respecto, la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (Avacu) recomendó ayer a los ciudadanos "que realicen varias veces al año sus propias mediciones in situ para comprobar que el suministro solicitado se corresponde con el realizado". La Organización de Consumidores y Usuarios asegura haber recibido varias quejas en los últimos días por este motivo, pero no le da mayor importancia. Avacu sí. Considera que puede tratarse de una estafa y, por su propia naturaleza, resultar desapercibida.

Según explican los denunciantes, la estafa se activa cuando el cliente pide el combustible por euros o solicita que le llenen el depósito. "Cuando el empleado programa 'Euros' o sólo activa el surtidor, manda una señal al ordenador central de la gasolinera y éste, a su vez, le envía al surtidor que despache litros de 900, 850 u 800 mililitros en vez de 1.000 a través de un software especial", explican. La única forma que tiene el cliente de evitar las estafa en las gasolineras trucadas sería, según agregan las mismas fuentes, solicitar el combustible por litros, no por euros.

La patronal le resta crédito

El secretario general de la patronal autonómica de gasolineras, José Luis Tort, aseguró ayer que desconoce esta supuesta estafa. "No tengo noticia de ello, pero si alguien lo sospecha, que exija que se hagan mediciones ante él en la gasolinera en cuestión y no dude en denunciarlo", señala. Tort restó credibilidad a estas denuncias porque "pasamos inspecciones periódicas de la Generalitat y cada aparato surtidor lleva su propio precinto. De modo que, si se trucase, sería detectado por la inspección". Además, agregó que sólo en un circuito cerrado se podrían comprobar las diferencias entre gasolineras porque "no siempre conducimos igual".