La Universitat de València y la Universidad Politécnica de Valencia han quedado fuera de los cinco proyectos seleccionados como "Campus de Excelencia Internacional" de ámbito global, aunque han obtenido la calificación de "prometedores", por los que recibirán ocho millones de euros.

El comité de expertos españoles y extranjeros encargado de evaluar los 18 planes estratégicos de modernización presentados a la convocatoria ha elegido los de las Universidad Complutense y Politécnica de Madrid (21 millones de euros); Autónoma de Madrid y CSIC (11 millones); Carlos III de Madrid (10 millones); Universidad de Barcelona y Politécnica de Cataluña (21 millones); y Autónoma de Barcelona (10 millones).

Además, han sido reconocidos como "Campus de Excelencia Internacional" de ámbito regional los proyectos de las universidades de Cantabria e Internacional Menéndez Pelayo (UIMP); Córdoba (que coordina a las de Almería, Cádiz, Jaén y Huelva), Oviedo y Santiago de Compostela, con una financiación de 7,5 millones de euros en cada caso.

La otra mitad de los 18 planes presentados en esta primera convocatoria conjunta de los Ministerios de Educación y de Ciencia e Innovación han obtenido la calificación de "prometedores" y una financiación variable (35 millones de euros en total) para poder ser perfeccionados y presentarse de nuevo en 2010.

Las universidades coordinadoras de estos últimos proyectos son Rovira y Virgili de Tarragona (4 millones de euros); Ramon Llull (privada, 2 millones); Pompeu Fabra (4 millones); Politécnica de Madrid (4 millones); Universidad de Valencia y Politécnica de Valencia (8 millones); Universidad de la Iglesia de Deusto (2 millones); Universidad de Granada (4 millones); Universidad de Navarra (privada, 3 millones); y Universidad de Sevilla (4 millones).

Las universidades seleccionadas como campus de excelencia desarrollarán los proyectos en cuatro años y tendrán un seguimiento anual de la ejecución de los fondos.

Según ha explicado el secretario general de Universidades, Màrius Rubiralta, en rueda de prensa, los proyectos seleccionados tienen un "alto potencial" de convertirse en "Campus de Excelencia Internacional" globales una vez ejecutado el plan estratégico presentado por las universidades correspondientes, lo que las situaría entre las mejores de Europa.

Igualmente ocurre con los regionales, que, además de contribuir al desarrollo local y territorial, podrían dar el salto con el tiempo y optar a ser considerados también de ámbito global.

En todo caso, tanto unas como otras han de servir de "tractores" de la modernización y transformación de todo el sistema universitario español, formado por 77 instituciones de enseñanza superior públicas y privadas.

El secretario general de Innovación, Juan Tomás Hernani, ha señalado que los proyectos elegidos cumple los objetivos del programa: alianzas (agregaciones) entre universidades y entre éstas y agentes socio-económicos y del sistema de ciencia y tecnología; integración e implicación de la universidad en su entorno; especialización, señas propias de identidad y transferencia del conocimiento al tejido productivo.

En su estrategia, las universidades colaborarán con hospitales, organismos privados y públicos de investigación, donde destaca el CSIC, gobiernos autonómicos, ayuntamientos y empresas.

Entre otros fines se persigue atraer a más profesores, investigadores y alumnos de otros países, impartir más posgrados internacionales, más estudios en inglés e innovar en sectores punteros como el biosanitario, la robótica, las comunicaciones o el agroalimentario, todo ello en un entorno físico más saludable, accesible y sostenible.

Serán "motores" de transformación socio-económica y del nuevo modelo productivo, basado en la economía del conocimiento, según el Gobierno.