El Síndic de Greuges recuerda a la Conselleria de Sanidad que debió utilizar el valenciano en el escrito de respuesta a una queja de un ciudadano porque la médico que le atendió se negó a dirigirse a él en esta lengua y le recomienda asimismo que promueva cursos de formación lingüística.

El síndic atiende así, en un informe recogido por Europa Press, la queja de un ciudadano porque, según relató, la médico de guardia de un ambulatorio de Benicarló (Castellón) cuando se dirigió a ella en valenciano le replicó que "le hablara en castellano o que se fuera del centro sanitario" y no recibió asistencia sanitaria. Este paciente presentó una reclamación en valenciano ante el gerente del departamento 01 de Vinaròs y recibió también la respuesta en castellano.

La Dirección General de Calidad y Atención al Paciente argumentó que la médico no pudo atender completamente a este hombre porque no entendía el valenciano perfectamente y no comprendía algunos de los términos que empleaba, pese a lo cual es usuario "no quiso expresarse en castellano pese a los requerimientos reiterados por parte de la facultativa para que así lo hiciera". De hecho, informó de que se puso esta reclamación en conocimiento de la médico quien afirmó que "en ningún momento" le negó la asistencia, sino que fue el propio paciente quien "no quiso recibirla en lengua castellana".

Asimismo, constata que desde la Conselleria "se respeta a todos los ciudadanos", pero que "son muchos los médicos que vienen a trabajar a nuestra Comunitat y que provienen de otros países, como este caso, o de otras autonomías". Además, resalta que la primera finalidad de un servicio sanitario es "la atención médica a la ciudadanía por encima del idioma en que se preste" y añadió que para ello en la actualidad la Agencia Valenciana de la salud necesita "contratar numerosos facultativos de fuera de la Comunitat".

Al respecto, el síndic señala que aunque coincide en que en el ámbito sanitario "lo prioritario es disponer del personal suficiente para atender las necesidades de todos los ciudadanos" y que "no puede limitarse el número de trabajadores por no tener conocimiento de valenciano". No obstante, añade que los ciudadanos valencianos tienen 2dercho" a usar la lengua cooficial que elijan en sus relaciones con los poderes públicos, lo que genera en la Administración k\u00A1la "la obligación de adaptar sus estructuras a esta situación para que en "todos los casos el ejercicio de la libertad de opción y la eficiencia de la elección estén garantizadas".

Por todo ello, concluye que la Conselleria de sanidad debería promover cursos de formación lingüística para que el personas a su servicio adquiera los conocimientos suficientes de valenciano y castellano, en el caos de personal de fuera de España, para 2atender con normalidad el servicio que tienen encomendado".

Asimismo, le recuerda "el deber legal" de usar en todos los procedimientos administrativos y en las comunicaciones con los interesados la lengua oficial elegida por éstos, ya sea el valenciano o el castellano, porque "lo que ha de orientar a todos los poderes públicos, autonómicos y locales es salvaguardar la opción lingüística de los ciudadanos e impulsar el valenciano en todos los órdenes sociales y especialmente ene la Administración pública.