¿Qué lleva a un cura irlandés a convertirse en un cazapederastas?

No soy exactamente un cura cazapederastas. Lucho contra la explotación sexual de los pobres. El negocio del turismo sexual con mujeres y niños, que cuenta con el apoyo de gente con mucho dinero. Son personas que cometen una de las mayores atrocidades a las que se puede someter a un ser humano. Proporcionan la satisfacción sexual a turistas que vienen de países ricos. Esos países no sólo se aprovechan de las minas de oro o los recursos de la selva. Ahora explotan los cuerpos de los más pequeños. Un sacerdote es una persona que debe estar preocupada por los derechos humanos y por promover cambios para lograr una sociedad más justa.

Es un hecho objetivo que la Iglesia católica tiene curas pederastas.

Es cierto. En cualquier profesión hay pedófilos, no sólo en la Iglesia. Hay profesores de natación, entrenadores, maestros e incluso periodistas. Los peores agresores son los padres. La mayoría de las víctimas que hemos atendido en mi programa fueron violadas por sus padres en el hogar. Muchas madres apoyan al padre frente a sus propios hijos. Eso significa que los agresores sexuales están en cualquier parte. En apariencia son personas respetables.

La Iglesia Católica está llegando a acuerdos judiciales en Estados Unidos para silenciar los casos. Como miembro de la Iglesia ¿qué cree que debería hacer? ¿Le parece bien que la Iglesia proteja a los sacerdotes pederastas?.

Lo que ha pasado en Estados Unidos está muy mal. Yo no estoy de acuerdo con las estructuras de la Iglesia. Deberían reorganizarse por completo. Yo no apruebo lo que hacen los pederastas. Estoy en contra de los obispos y la jerarquía católica que dejan impunes los casos de pedofilia. La solución no es quedarse con los brazos cruzados. No actúan como Jesús lo habría hecho, como activistas que defienden los derechos de los niños.

¿Qué debe cambiar?

Deberían salir de los palacios y bajar a la calle. Llevar el evangelio y el mensaje de los derechos humanos a los pobres.

Usted sigue siendo un católico de base. ¿Ha tenido problemas con sus superiores?

Sí que he tenido problemas con algún sector de la jerarquía. La última vez mi obispo me recomendó un traslado por mis críticas. Yo vivo de forma sencilla la cristiandad. Todo debería reducirse a velar por los derechos humanos y la dignidad de las personas. Es una cuestión independiente a ser católico, protestante o musulmán ya que estamos unidos en el trabajo por la paz y la justicia social.

Usted tiene el sobrenombre de cazapederastas por la cruzada que emprendió en Filipinas y que le llevó a grabar con cámara oculta el interior de los clubs. ¿Cuál es la fórmula para erradicar la prostitución infantil?

Los ciudadanos tienen que ser conscientes de lo que está bien y lo que no. Deben despertar y denunciar los casos que conozcan. El problema son los clientes que van a los clubs o a los hoteles con los niños. Los testigos deben denunciar los abusos.

¿A cuántos niños ha liberado y a cuántos pederastas ha logrado meter entre rejas?

Desde nuestra organización hemos rescatado a 200 ó 300 niños en los últimos cinco años. Sin embargo, prácticamente no hemos conseguido meter a casi ningún pederasta entre rejas por culpa del sistema corrupto de justicia filipino. Permiten que salgan libres. Ellos pagan y no son condenados. Iniciamos una campaña de concienciación para que se persiga a los pederastas y se les encarcele. Logramos abrir 37 procedimientos contra pedófilos y en seis años sólo ha habido una condena.

La sociedad española tiene la sensación de que los turistas sexuales que buscan niños en Filipinas o Tailandia son alemanes, británicos y holandeses. ¿Hay españoles?

En Filipinas hay clubs especializados en atender a españoles. Utilizan nombres españoles para atraer a gente que viene de España.

¿Cómo operan las redes?

Los negocios no son de filipinos. Los clubs los montan alemanes, australianos, coreanos y franceses con mucho dinero. Compran los niños a padres que trabajan como agricultores en zonas rurales. Les dicen que van a ser empleados de hogar, pero acaban en clubs.

¿Pueden las víctimas rehacer su vida?

No pueden borrar de su memoria los abusos. Nuestro objetivo es que superen el trauma y tengan una buena oportunidad. Algunos chicos que hemos sacado de la calle se han graduado y son un ejemplo para el resto. Es muy importante devolverles su dignidad.

Reconocimiento

Ha sido tres veces candidato al Nobel de la Paz. ¿Qué supondría para usted recibir el premio?

El Nobel no es sólo un reconocimiento personal o un premio a una ONG como la mía. Es un galardón que revela la situación de las víctimas por las que luchamos. Mostraría al mundo la situación de los niños que son explotados sexualmente. Es un premio que da esperanza a la gente. Con el Nobel a Obama este año los ciudadanos confían en que trabaje por la reducción del armamento nuclear.

Acaba de hacerse pública la candidatura al Nobel de la Fundación Vicente Ferrer. ¿Conoce el trabajo que desempeñó Ferrer en la India?

Vicente Ferrer fue un luchador por los derechos humanos. Nosotros tratamos de inspirarnos en gente como él. Es clave darse cuenta de que hay miles de personas buenas. Algunos son gente de la Iglesia y otros laicos, pero trabajan por todo el mundo entregándose a los demás. Dejan su vida cómoda en Europa y en algunas ocasiones se convierten en objetivo de asesinos. Pero no hace falta salir de España. Aquí hay mucha gente buena que da su vida por los más pobres.

P:

R:

P:

R: