Científicos de la Unidad de Biología Evolutiva de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) de Barcelona, especializados en el estudio de la diversidad genética en las poblaciones humanas, han acometido la investigación más completa realizada hasta ahora del ADN de las poblaciones de España. Lo han hecho a través del análisis de 300.000 marcadores genéticos de 300 individuos de 10 regiones. Las conclusiones de este trabajo, que han sido recogidas por la revista especializada Human Genetics, revelan que no existen grandes diferencias genéticas entre las poblaciones españolas. No obstante, dentro de esta homogeneidad general, la investigación apunta que los genes de la población valenciana divergen más de los del resto de españoles que los de los vascos.

En este sentido, el estudio firmado por los investigadores Hafid Laayouni, Francesc Calafell y el catedrático Jaume Bertranpetit, resalta que los vascos "no pueden ser considerados un grupo genéticamete aislado bajo un análisis general del genoma y las interpretaciones sobre su origen deben ser revisadas". El objetivo de esta investigación, se lee en la publicación, ha sido "clarificar la posición genética de los vascos en relación con las poblaciones que les rodean".

Hace 19 años otra investigación de Bertranpetit, basada en el análisis de marcadores genéticos clásicos presentes en la sangre, como el tan traído Rh negativo, reforzó las teorías sobre la singularidad genética de los vascos. Sin embargo, casi dos décadas después, "con el avance en los análisis de ADN mitocondrial (mtDNA) -el que se hereda de la madre- y en el cromosoma Y -de herencia paterna-, los resultados muestran una diferenciación mucho menor de los vascos en relación con sus poblaciones vecinas".

Los investigadores, que han realizado un estudio basado en los marcadores SNP (siglas en inglés de polimorfismos por cambio de un solo nucleótido), variaciones sin funcionalidad aparente dentro de las secuencias de ADN a partir de los que se puede establecer el origen de una persona, determinan "en general, una falta de estructura geográfica de la variación genética en España y, en particular, que los vascos no se diferencian especialmente".

Extremeños: los más singulares

Es más, aunque ninguna de las divergencias del ADN de las 10 regiones analizadas es relevante desde el punto de vista estadístico, los genes que demuestran más distinción respecto al resto son los de los extremeños, seguidos de los de los valencianos y en tercer lugar los de los vascos (Ver gráfico), cuya característica más interesante en el caso del cromosoma Y es la falta del haplogrupo o linaje E3b2, originario del norte de África.

La investigación, al centrarse en demostrar que cuando se aplica una perspectiva amplia del genoma, los vascos no se diferencian particularmente de otras poblaciones ibéricas", no explica porque el ADN de los valencianos es el segundo que más distinciones presenta respecto al resto.

Hace dos años, otro estudio del cromosoma Y de muestras de 1.140 individuos de toda España realizado también por científicos de la Pompeu Fabra, en este caso en colaboración con la Universidad de Leicester (Reino Unido) reveló que los rasgos genéticos de los valencianos eran diferentes al resto de españoles al tener una mayor herencia norteafricana y una menor influencia sefardí.

Más rasgos norteafricanos

Esta investigación establecía un perfil genético ibérico en el que el 10,6% de los cromosomas de la población española presenta características atribuibles a poblaciones originarias del norte de África, mientras que el 20% provendría de nuestros ancestros judíos.

En el caso valenciano, según este estudio firmado también por el investigador Francesc Calafell la herencia genética sefardí no supera el 15% mientras la norteafricana es mayor que en el conjunto de España, un 13%, debido a la mayor influencia histórica de los moriscos en la Comunitat Valenciana. Este primera investigación fue publicada en el American Journal of Human Genetics.