?
Si cumplir cien años todavía despierta la admiración pese a ser un hecho nada más que biológico, ¿Qué supone soplar cien velas siendo un referente moral, intelectual y personal? Pues supone que más de 300 personas (entre ellos el ex presidente catalán Jordi Pujol) y que una institución como Acció Cultural del País Valencià aplaudan a rabiar a Josep Lluís Bausset, valencianista y activista político que ayer fue agasajado en el Octubre Centre de Cultura Contemporània de Valencia. La catarata de elogios vertida ayer sobre l'home subterrani -apelativo alumbrado por Joan Fuster que aludía a su condición de hombre combativo pero discreto- da muestra de la dimensión alcanzada por este venerable anciano, que aún publica todas las semanas su crítica de pilota valenciana en Levante-EMV o que es esperado con expectación en varias tertulias locales.
Eliseu Climent recordó la condición de cofundador de Acció Cultural de Bausset. "Es la memoria de nuestro pueblo", dijo, y resaltó que su compromiso político no se retrotrae a la dictadura de Franco o a la Guerra Civil; es tan antigua que se remonta a Primo de Rivera. "Bausset -dijo- resume la dignidad de los valencianos; pocas veces cien años han estado tan bien aprovechados", concluyó el presidente de Acció Cultural.
Santi Vallés, biógrafo de Bausset, dijo que si Fuster viviera "se alegraría de que el tiempo le haya quitado la razón, ya que Bausset tiene cada vez más repercusión pública". Señaló que el de l'Alcúdia (nacido en Paiporta en 1910) "es el prototipo de intelectual, pero con valores personales aún más sólidos todavía", recalcó.
El alcalde de l'Alcúdia, Robert Martínez, apeló a la "obligación cívica" del consistorio a la hora de respaldar todo homenaje al maestro. "Conozco y admiro a Bausset -confesó- pero no sólo al intelectual, sino al ciudadano que se pasea por el pueblo, que recoge firmas o que protesta por la falta de puntualidad de algún acto de la Casa de la Cultura. Si no comienza a la hora establecida, se levanta y se va casa", reveló Martínez, entre las carcajadas del público. El alcalde aclaró que Bausset "no es hijo predilecto de l'Alcúdia; es hombre predilecto. Y eso no es un título, es una cualidad humana", zanjó.
El rector de la Universitat de València, Francisco Tomás, dijo que "su fuerza y su vitalidad nos dice que la razón está de nuestro lado; no sé si la fuerza. Si no se cansa Bausset -agregó- cómo podemos cansarnos los temas". Tomás puso de relieve su lucha por la democracia y "la noble envergadura de su compromiso" y aseguró que todo lo ha hecho "de una manera adorablemente romántica".
El abad de Montserrat de Barcelona, Josep Maria Soler, calificó a Bausset de "servidor de la patria" y dijo que la "calidad de un país depende de la calidad humana de su gente". Y alabó la "sabiduría vinculada a la dignidad ética"
Alabanzas del histórico Pujol
Histriónico y fiel a esa característica dispersión dialéctica que luego no es tal, el emblemático Jordi Pujol confesó no haber tratado a Bausset pero sí compartir "amigos e ideas comunes". "Señor Bausset -le espetó desde la mesa el ex presidente de la Generalitat- yo sólo acepto ya dos tipos de invitaciones: las de las gente joven, y las de gente mayor, porque así puedo darles las gracias". En un momento dado, el molt honorable se paró en seco y lanzó: "escuche, señor Bausset, le he estado mirando desde que ha comenzado el acto y creo que usted no se lo está pasando bien".
El hombre de ciencia que es un humanista
Es un humanista colosal. Pero la formación de Bausset es eminentemente científica. Licenciado en Farmacia y en Químicas, ha ejercido de farmacéutico, practicante o profesor (dio clases de Ciencias, entre otros, en el Josep de Ribera de Xàtiva, refugio de perseguidos). Sus reivindicaciones se extienden a lo largo de más de ochenta años: desde que siendo jovencísimo ya cuestiona a Primo de Rivera hasta su actual defensa de la TV3 en territorio valenciano. Ayer fueran numerosas las personalidades que le respaldaron: Enric Morera, Joan F. Mira, Vicent Soler, Josep Guia, Francesc Signes, Paco Gandia, Jesús HuguetÉ Presentó el acto Alfons Llorenç. Bausset rehusó intervenir de antemano. Enemigo de estos actos, confesó a Levante-EMV que "esto es demasiado; es una barbaridad. Pero gracias, gracias"
