"Un desastre para Valencia"

Asombro, rabia, incredulidad... Y hasta tristeza. Las palabras se les agolpan en la boca precisamente porque es difícil encontrar palabras. Trece artistas valencianos expresan en estas páginas, a preguntas de Levante-EMV, su estupor y su ira por la censura de la Diputación de Valencia de unas fotos sobre el caso Gürtel en la exposición del Muvim, que ha provocado la dimisión por "dignidad" de su director, Román de la Calle. "Parece mentira que los propios políticos del PP soporten esto", son algunos de los lamentos. "Esto ha sido un desastre para Valencia", asevera, desolado, uno de los artistas.

Miquel Navarro. "La censura es un asunto terrible", asegura el pintor de Mislata, para el que hechos como el veto de las fotografías sobre el caso Gürtel en la exposición sobre fotoperiodismo "no tienen sentido". "Estamos viviendo en un país que lleva ya unos años de democracia. No ha lugar a aplicar la censura en una exposición", manifesta Navarro. "En una sociedad democrática cosas así no pueden pasar. Eso es ir hacia atrás".

Jordi Teixidor. El pintor es claro: "Es vergonzoso, tanto para el mundo del PP como el hecho de que todavía se produzcan situaciones así". Teixidor quiso alabar "la dignidad y la coherencia" de Román de la Calle, actitud que a su juicio se resume en las palabras "vehementes y emocionadas" del propio director. "Emocionado -recordó el artista-, Román de la Calle dijo 'Som il·lustrats'. ¿Somos o no somos ilustrados? Obviamente hay una parte de la sociedad y de los políticos valencianos que no lo son". Pese a todo, pidió: "Debemos intentar seguir siendo ilustrados a pesar de todo lo que estamos viviendo en estos momentos en Valencia. Lo mejor de todo es ver que aún existen personas como De la Calle". Sobre si debería haber destituciones, dijo: "Claro que sí, pero con lo que está lloviendo, la vergüenza de ver la situación de la judicatura, de Garzón, pensar que alguien dará la cara, desgraciadamente, ni me lo planteo".

José María Iturralde. Acaba de regresar de Nueva York, donde ha expuesto, pero no esquiva la pregunta: "Me parece terrorífico que en el siglo XXI haya habido una cacicada de ese calibre. ¿En qué país vivimos?", se pregunta, para añadir: "Máxime, cuando lo que hay se presentaba infinitamente más educado que lo que se va a ver en los 'ninots' de las Fallas. ¿Van a quitar las Fallas?" Y advierte: "Están deshaciendo la cultura y la vida artística de esta ciudad. Si había poco, con estas acciones, parece mentira que los propios del PP soporten esto, no lo entiendo. ¿Adónde van? Quizá logren votos pero, como dijo Unamuno, vencerán pero no convencerán. Es un desastre para la ciudad porque el Muvim estaba funcionando muy bien".

Uiso Alemany. El escándalo de la censura de las fotos lo pilla en Brasil pero, a través de unos conocidos, le han llegado los ecos. Y no oculta su enfado. "Me adhiero totalmente a la crítica, porque me tienen harto", asegura. "Me solidarizo con mi amigo Román de la Calle. Estas cosas no debería ocurrir en una sociedad democrática", afirma. Para Alemany, De la Calle ha dimitido porque "es el único que tiene dignidad". "Pienso que debería haber dimisiones de los responsables de estos hechos".

Antonio de Felipe. De exposición en Estocolmo, el pintor valenciano declinó opinar al no tener información sobre lo sucedido.

José María Molina Ciges. Sobre si deben rodar cabezas políticas, no puede evitar reírse: "Aquí no dimite nadie". "Román es íntimo amigo mío y tiene mi solidaridad". "Su gesto de dimitir me parece muy justo", afirma. "El hecho es que son unos burros y, qué vamos a hacerle, tirarlos de ahí, la única manera de que esto pueda funcionar. Demuestran muy poca capacidad de diálogo, de tolerancia, de ser cultos y personas como hay que ser. Son lo que son, hijos y nietos del franquismo, y la intolerancia la tienen por encima de todo".

Manuel Boix. El internacional escultor y pintor de l'Alcúdia indica que la censura se produce porque hay "un caldo de cultivo" político gestado desde tiempo atrás, en una "ciudad y un país culturalmente devastados". Para Boix, la censura "sirve para cubrir carencias personales". Subrayó la "altura personal e intelectual" de De la Calle al dimitir. "Ha sido un ejemplo de resistencia y coherencia en un país y una ciudad cultural y políticamente mediocres", afirmó, a la vez que alertó a todos los creadores. "Si a personas que admiro y tengo como amigos los tratan así, habrá que ir con cuidado al doblar la esquina, metafóricamente hablando", argumentó. Preguntado por si debería haber dimisiones, fue contundente: "Ejercer la violencia cultural no puede quedar impune, pero para dimitir hay que tener vergüenza".

José Sanleón. En sus carnes sufrió la intolerancia, cuando una de sus piezas -"El esclavo"- fue vetada para su destino original, la calle. Para el escultor, la censura "está fuera de lugar". La decisión política de prohibir las fotos es "un atentado a la libertad de expresión de una irresponsabilidad total", además de una "torpeza, algo absurdo". "Son fotografías que no se censuraron en los respectivos diarios y ahora se ha creado un clima de enfrentamiento que es muy triste", subrayó.

Joan Genovés. "Es un regreso al pasado, al franquismo, pero de forma mucho más chapucera". Así opina este pintor valenciano, quien, tras expresar su indignación -"es una barbaridad que estas cosas sucedan en 2010"- prefiere observar lo sucedido con un mirada irónica con efecto terapéutico: "El franquismo lo hacía mejor porque cerraba la exposición directamente". "De tan grotesco y patético, resulta hasta cómico", agrega Genovés, quien considera que los censores han hecho "una gran propaganda a la exposición". Genovés cree que los políticos "que han ordenado retirar las fotos deberían dimitir".

Juan Francés. El pintor setabense se excusó por no pronunciarse alegando que no ha visto las fotografías retiradas. Sí sabía de la dimisión de De la Calle, "que es amigo", pero insistió en que no había visto las imágenes.

Carmen Grau. La pintora es tajante: "Me da vergüenza y es inexplicable. No tiene sentido ninguno, es vergonzante y recuerda etapas muy desagradables que hemos vivido". Sobre si alguien debería asumir responsabilidades, afirmó: "Después de un acto tan garbancero, sí. Es muy fuerte".

Artur Heras. El pintor, escultor y diseñador gráfico subraya lo "absurdo" de la censura en este caso, "cuando las fotos ya han sido publicadas y no hay retoques ni manipulación". "Ahora, es curioso porque, si se lee entre líneas, se ven posiciones en el propio partido que gobierna diferentes; con lo cual, las opiniones están movidas por intereses, no por una defensa de la libertad. Hay elecciones pronto y entre ellos también..." Para Heras, en el PP "están jugando con la opinión pública", para dar la impresión de que tienen "gente para todo".

Nassio Bayarri. "De entrada, no se puede retirar nada de una exposición ya expuesta", asevera el pintor, que añade: "Me parece absurdo lo que se ha hecho. Eso, profesionalmente, no está permitido". Para Bayarri, el arte "no es un juego de 'ahora te dejo, ahora te quito' y, como soy el alcalde del pueblo, descargue usted ese burro y vuélvalo a cargar". "Eso, que pasara en la dictadura, allá ellos, pero ahora no. Hay que tener un respeto a la exposición, al montaje y al trabajo. Es casi un falta de ética".

Joan Cardells. El escultor tira de sarcasmo: "Todo suena bastante torpe. La decisión, más que neutralizar, ha servido de amplificación. Me da un poco de pena. Parece como si las personas que han tomado esa medida fuesen topos de la oposición". Confiesa que ha llegado a pensar que podía haber una rectificación de los políticos "por encima de la diputación", lo que sería "muy interesante porque potenciaría el partido en el poder en la Comunitat", aunque ahora ya le parece "bastante increíble". "Todos meten las patas pero en este caso es demasiado chusco".

Rosa Torres. "Como a todo el mundo sensato, lo veo una barbaridad. Si no querían que se vieran las fotos, ahora son famosas en el mundo entero", dice la pintora. "Por una parte me parece bien, para que se enteren de la barbarie que aquí tenemos, pero por otra, me da tristeza que pase esto. He vivido épocas de represión y de censura. Que pase hoy en día aquí...".