El vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Fernando de Rosa, ha asegurado hoy que sería "sano" para la Justicia y la sociedad que un magistrado como Baltasar Garzón, sobre el que pesan tres querellas en el Tribunal Supremo, fuera apartado de forma "automática" de sus funciones.

De Rosa, quien ya ha anunciado que se abstendrá en la tramitación de la suspensión cautelar de Garzón, ha considerado que la Ley Orgánica del Poder Judicial, "por apariencia de objetividad", debería contemplar la posibilidad de apartar de forma automática a cualquier juez en estas circunstancias y evitar así "maniobras de dilación" y "cosas que desgarran la Justicia".

En una entrevista en Onda Cero, el vicepresidente del CGPJ ha reconocido que es amigo personal del presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, vinculado al 'caso Gürtel', amistad que, a su juicio, no le inhabilita para actuar con objetividad e independencia con Garzón.

De Rosa ha insistido en que "lo medular" de esta causa es si el juez de la Audiencia Nacional, con tres querellas en el Supremo, "puede seguir tramitando asuntos en su Juzgado", ha insistido.

Para el vicepresidente del CGPJ, nadie puede pensar que tiene "méritos adquiridos" para que la Justicia actúe con él "de forma diferente", y ha defendido su abstención en el procedimiento contra Garzón para eliminar cualquier sombra de duda sobre su independencia y objetividad.

Preguntado por las declaraciones de ayer de Baltasar Garzón en las que aseguró que la situación que vive es "muy injusta" y se debe a "intereses que nada tienen que ver con la Justicia", De Rosa ha negado cualquier "conspiración" o "campaña" contra el magistrado de la Audiencia Nacional.

"El foco debe estar en la actuación del propio Garzón que tiene tres querellas en el Supremo y no discutir si el CGPJ tiene o no objetividad, o si lo magistrados del Supremo son conservadores o progresistas", ha replicado.