Los abogados de algunos de los imputados en el 'caso Gürtel' han solicitado a la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) tener acceso al contenido de las conversaciones intervenidas por el juez Baltasar Garzón entre los cabecillas de la trama de corrupción y sus letrados en la prisión de Soto del Real, informaron fuentes jurídicas. Señalan que su intención es conocer en qué medida dichas escuchas afectan a sus clientes.

La petición se produce al considerar los letrados que el contenido de estas escuchas podría beneficiar a sus clientes al derivar en la nulidad de pruebas obtenidas a raíz de estas intervenciones, en el caso de que se impugnen parte o todas las escuchas.

Antes de que se iniciaran las deliberaciones de los recursos contra Garzón, los letrados ya solicitaron a la Sala que las reuniones no fueran a puerta cerrada, algo que rechazaron los magistrados que conforman la Sala encargada de resolver los recursos del 'caso Gürtel'.

Entretanto, la Sala de lo Civil y Penal celebra esta mañana el quinta día de deliberaciones sobre los recursos interpuestos contra las intervenciones ordenadas por Garzón. En los últimos encuentros, la falta de consenso entre los magistrados Francisco Javier Vieira, José Manuel Suárez Robledano y Emilio Fernández de Castro ha impedido alcanzar un acuerdo sobre la validez o impugnación de las escuchas teléfonicas.

POSTURAS ENFRENTADAS

Según publicó la pasada semana el diario 'El País', Vieira aboga por anular parte de las escuchas, mientras que Fernández de Castro opta por la impugnación de la totalidad de las intervenciones. Por su parte, Robledano se situaría en la misma línea del juez Antonio Pedreira, respaldando la validez de las intervenciones.

La posibilidad de que se declare ilegal parte o todas las escuchas telefónicas podría poner en peligro la totalidad del proceso en el que se investiga la trama de corrupción ligada a administraciones del PP al producirse la denominada Teoría de los frutos del árbol envenenado.

Esta teoría se fundamenta en que todos aquellos medios de prueba que, aún siendo lícitos, tienen su origen en los resultados que se obtienen a partir de una actuación ilegal, son ineficaces y, por tanto, no gozan de ninguna virtualidad en el proceso judicial.

Hace ya dos semanas, Francisco Javier Vieira, José Manuel Suárez Robledano y Emilio Fernández iniciaron las deliberaciones para llegar a un acuerdo sobre los recursos que podría provocar la nulidad parcial o total de las escuchas telefónicas.

Fuentes del TSJM indicaron que, una vez que la Sala llegue a un acuerdo, el ponente redactará un auto en el que se motivará la decisión alcanzada por los magistrados.

En el caso de que se decrete la nulidad de las conversaciones, los abogados defensores podrían solicitar la nulidad de otras pruebas como declaraciones solicitadas a raíz de las intervenciones realizadas en la cárcel, en base a la citada Teoría de los frutos del árbol envenenado.

ESTRATEGIA DE CONFUSIÓN

El pasado enero, el juez Pedreira ya avaló las escuchas al desestimar los recursos interpuestos por José Luis Izquierdo y Javier Nombela Olmos en el que solicitaban la nulidad de las resoluciones dictadas por el juez Garzón referidas a la intervención de las comunicaciones telefónicas.

Los letrados alegaron en sus recursos que las intervenciones violaban lo dispuesto en la Ley Orgánica General Penitenciaria (LOGP), que reserva exclusivamente a los supuestos de terrorismo toda intervención de las comunicaciones entre un interno y sus abogados.

En el auto, la Sala de lo Civil y Penal criticó que "la estrategia de los recurrentes consiste en confundir la intervención de las comunicaciones a un interno como medida de régimen penitenciaria, con la intervención de esas comunicaciones como medida de investigación adoptada en un procedimiento penal, de manera que las limitaciones de una se trasmitan a la otra".