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La pregunta de control al presidente del síndic socialista sobre el coste que tuvo para las arcas autonómica la visita del Papa se quedó ayer de nuevo sin respuesta. Cuatro año después del evento, el jefe del Consell, Francisco Camps, evitó aclarar en las Corts cuánto dinero gastó su Consell en este asunto y mantuvo que "no habría costado un sólo euro" si el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, hubiera sido leal con la Comunitat como, presumió, lo será con las otras comunidades que el pontífice tiene previsto visitar próximamente como es el caso de Santiago y Cataluña.

Camps, que acusó a Zapatero de intentar "boicotear de la forma más deleznable" la visita a Valencia de Benedicto XVI, llevó su discurso victimista al extremo al afirmar que "si fuera por el Gobierno de Zapatero posiblemente la Comunitat Valenciana no existiría". Es más, mantuvo que Zapatero "con ayuda del PSPV nos ha hecho la vida imposible". Sin embargo, y a pesar del tremendismo de su afirmación, el jefe del Consell evitó el cuerpo a cuerpo con Luna, en quien Camps en sus últimas comparecencias en las Corts ha personalizado todos los males de la oposición. Aunque las revelaciones de Luna sobre el informe policial que vincula de manera contundente a la trama Gürtel con la organización de la visita papal pillaron por sorpresa a los populares, Camps se cuidó de no salirse del guión. Se proclamó "orgulloso" de aquel fin de semana de julio de 2006 porque, apostillo, Valencia "dio una buena imagen".

"El papanatismo de la izquierda"

El líder popular reprochó a los socialistas que les moleste "la presencia de la Iglesia" mientras "posiblemente aplaudan" su visita a Barcelona porque "forma parte del papanatismo tradicional de parte de la izquierda, de aceptar siempre lo que ocurre en Cataluña y nunca en la Comunitat".

Respecto a la pregunta concreta de Luna sobre el montante total del coste de la visita, Camps se ciñó a una respuesta del Consell de hace meses que mencionaba una transferencia de 1.900.000 euros de la Generalitat a la Fundación V Encuentro de las Familias y obvió que recientemente su Gobierno aprobo una modificación presupuestaria que supuso una nueva transferencia de dos millones de euros a la entidad. Según Camps las cuentas de esta fundación, en la que participa la propia Generalitat, son públicas y transparentes. Cuatro años después de la visita papal, la Generalitat sólo ha hecho público la liquidación de las cuentas de 2006.

El presidente aprovechó su intervención para hacer una alusión a los últimos datos del CIS. Según dijo, el PP ha "destripado" las últimas encuentas y ha concluido que ha aumentado la intención directa de voto desde enero de 2009 hasta el mismo mes de 2010, frente a la bajada del PSPV. La distancia en el año del escándalo Gürtel ha pasado de 5 a 15 puntos, según el jefe del Consell. La cocina de los datos realizada por el Consell va más lejos al estimar que 80.000 valencianos que votaron a Zapatero ahora lo haría al PP.