El vicepresidente segundo y conseller de Economía y Hacienda, Gerardo Camps, desveló ayer tras meses de secretismo qué empresas y fundaciones pública se verán afectadas este año por el plan de austeridad de los presupuestos de de 2010. En la lista figura finalmente Mundo Ilusión, el proyecto estrella del presidente de la Diputación de Castelló, Carlos Fabra, así como otras entidades cuya actividad era prácticamente nula o, como se vio ayer, su objeto social perfectamente asumible por otras mercantiles. Es el caso de Comunitat Valenciana d'Inversions , que será absorbida por el Instituto Valenciano de Exportación o la Sociedad para la Imagen Estratégica que quedará bajo el paraguas de la Sociedad Proyectos Temáticos.

Los recortes afectarán a seis de las actuales 26 sociedades mercantiles y nueve de las 40 fundaciones que componen el pesado sector público valenciano. Camps cifró el tijeretazo en un 25% y el ahorro en 115 millones de euros. En realidad, el plan había sido anunciado en noviembre de 2009, pero Hacienda se resistía a ponerle nombre y apellidos. Sin ir más lejos el pasado martes, el número dos de Economía, José Manuel Vela, aseguró que la lista se conocería en dos meses. Ayer, sin embargo, Gerardo Camps, llevó el documento al pleno del Gobierno. En pleno debate por las medidas de recorte de Zapatero, el vicepresidente contrapuso su "realista" plan a la "improvisación" de Moncloa.

En el apartado de empresas públicas, la baja de Mundo Ilusión resulta llamativa. La sociedad, un proyecto emblemático bajo cuyo paraguas se ha construido buena parte del litoral castellonense, fue excluida inicialmente de los presupuesto. Sin embargo, ante las presiones del barón provincial de Castelló, Hacienda se vio obligada a activarla. Hasta hace unas semanas, la sociedad carecía de actividad y se limitaba a pagar el sueldo del gerente y de su secretaria. El nuevo intento de enterrar la firma llega cuando teóricamente el proyecto se había desbloqueado con la aprobación del PAI Maria d'Or Golf y mientras Fabra, convaleciente de una delicada operación, permanece alejado de la primera línea. El titular de Economía matizó que "si se ha de revitalizar" el proyecto lo hará Proyecto Cultural de Castelló y Protectos Temáticos.

Por otro lado, la Generalitat también liquidará tres de las empresas instrumentales creadas en al etapa de Rafael Blasco en Territorio para promover viviendas protegidas. La mayoría son deficitarias y el Síndic de Comptes llevaba tiempo pidiendo su extinción.

El criterio de escasa e incluso nula actividad es aplicable para muchas de las fundaciones víctimas del tijeretazo. Es el caso de las fundaciones dependientes de Cultura creadas para gestionar proyectos que llevan años en bloqueados, como es el caso de la Fundación de las Artes Escénicas. Gerardo Camps también sacrificará la Fundación Gestión y Eficiencia Empresarial, la entidad "fantasma" que estuvo recientemente en el ojo del huracán al denunciar el PSPV que la Diputación de Valencia iba a concederle una subvención que triplicaba su presupuesto. Como otras muchas fundaciones del Consell, su actividad no iba mucho más allá que pagar dos sueldos.

Precisamente, el ahorro que pretende el Consell saldrá del capítulo de personal. A preguntas de los periodistas, Gerardo Camps admitió que la reestructuración del sector público -que se ampliará hasta 2012- afectará a cargos directivos y al personal. Los detalles se conocerán conforme las entidades vayan bajando la persiana.