La situación de la pequeña jirafa, que nació hace un par de meses en BIOPARC Valencia, mejora. Su estado evoluciona bien aunque lentamente, ya que todavía no alcanza un peso por encima del nivel deseado. Desde su nacimiento, la madre la rechazó por ser primeriza y, por tanto, los cuidadores del parque han sido los encargados de criarla. Tanto la alimentación a base de biberón y productos lácteos, como la estimulación ha sido llevada a cabo por sus cuidadores que han contado con una colaboración muy valiosa, sus "tías" Ché y Danalta, la dos jirafas adultas que provienen de Viveros. Y muy especialmente de Danalta de quien la pequeña jirafa no se separa. Todo este trabajo ha posibilitado que esta cría haya realizado progresos tales como adaptarse muy bien a su grupo, tolerar el alimento, salir a recintos exteriores y ahora aceptar los nuevos alimentos incorporados en su dieta.

La alimentación que se ha seguido hasta ahora es la aconsejada según la bibliografía, las directrices de la EAZA y otras experiencias que existen:

El primer sustento con el que se la nutrió fue el calostro de vaca durante los primeros días, en los que se contó con la colaboración de ganaderos. A continuación, se le dio un suplemento de leche para terneros y, más recientemente, se realizó un paso intermedio ofreciéndole pienso para destete de terneros. Cabe comentar que este producto no fue de su agrado.

Hace poco, siguiendo también la bibliografía, se ha incorporado un porcentaje de leche de vaca fresca a los biberones y así está funcionando mucho mejor.

Realiza 3 tomas diarias, una a primera hora de la mañana; a las 7h, otra a mediodía, concretamente a las 14h y la última a las 19h de la tarde. Todo ello, en biberones de un preparado lácteo que se suele utilizar para criar terneros.

En estos momentos, cuando ya ha cumplido los dos meses de vida, se está incorporando a su dieta alimento sólido como es la zanahoria y la endibia rallada, avena triturada y ramas de moreras y frutales. Además, se trae expresamente, alfalfa fresca para ella. Esta pequeña recibe las mejores atenciones por parte del personal de BIOPARC Valencia. Como complemento de estos alimentos, seguirá tomando biberones hasta aproximadamente los 7 meses, cuando se produzca el destete definitivo. Además, ahora con el cambio de alimentación comienza también a beber agua.

Otro tema muy importante en su cuidado ha sido el seguimiento de las heces, puesto que es la forma de saber si está digiriendo bien el alimento. El resultado es que, no habiendo padecido trastornos digestivos importantes, sí ha presentado algunos problemas de estreñimiento. La solución, que en la naturaleza la pone la madre estimulando a la cría, en este caso, ha venido de la mano de los cuidadores, que también han sustituido el rol de la misma.

Finalmente, se está consiguiendo que las heces sean cada vez más similares a las de un ejemplar adulto, lo que es evidencia de que su aparato digestivo funciona mejor.