Los casos de malaria han aumentando exponencialmente en la Comunitat Valenciana, donde esta enfermedad, como en el resto de España, se considera erradicada desde la mitad del siglo XX. Sin embargo, desde 1983, el último año en el que no se registró ningún caso de paludismo, el número de personas que sufren enfermedad no ha cesado de crecer hasta alcanzar una cifra récord de 70 casos en 2008.

Aparentemente, se trata en todos los casos de malaria "importada" por población inmigrante y turistas, aunque los expertos creen cada vez más probable que se produzca un fenómeno de transmisión local de la malaria por la presencia en territorio valenciano de hasta 7 especies del género Anopheles potenciales transmisores de esta enfermedad.

Así lo afirma, entre otros, el catedrático de Control de Plagas de la Universitat de Valenciana, Ricardo Jiménez, que acaba de participar en la reunion anual del proyecto europeo EDEN, responsable de identificar los ecosistemas y condiciones ambientales que pueden influir en la dinámica de diversos agentes patógenos como la propia malaria o el emergente y a veces mortal "virus del oeste del Nilo".

El grupo dirigido por Ricardo Jiménez en el Laboratorio de Entomología y Control de Plagas del Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología Evolutiva de la Universitat Valenciana presentó en el congreso de EDEN los datos sobre las 30 especies diferentes de mosquitos hallados en territorio valenciano. Entre estas especies se encuentran 7 del género Anopheles que pueden transmitir la malaria.

"La eventual picada de alguna de estas especies de Anopheles sobre cualquiera de las personas portadoras de la enfermedad podría iniciar un fenómeno de transmisión local", apunta Jiménez, para quien es solo "cuestión de tiempo" que se produzca un episodio de estas características. Por otra parte, los estudios han destacado el riesgo existente cerca de las zonas protegidas ZEPA, donde se dan las condiciones -aves portadoras y mosquitos para la transmisión del virus del Nilo.

Dos especies cargadas de peligros

El informe del Laboratorio de Entomología y Control de Plagas recoge los datos obtenidos en las reciente capturas del "Aedes albopictus" o "mosquito tigre" en el sur de la Comunitat. "Las predicciones acerca de la evolución y comportamiento de este mosquito, potencialmente transmisor del dengue y la fiebre amarilla, indican que su actividad puede superar las 40 semanas al año gracias a las elevadas temperaturas y las abundantes horas de luz solar" y pueden afectar "directamente" al ritmo de expansión de la especie, multiplicando la aparición de episodios de alarma social por las molestias que provocan "sus agresivas picadas". Por otra parte, en los últimos años se han incrementado el numero de aves migratorias portadoras de temible virus del Nilo.