La mala planificación del trabajo que, según opina el sindicato USCA, lleva a cabo Aena, les hace temer que la llegada del Gran Premio de Fórmula 1 les desborde y "pueda afectar al evento". Según su experiencia, los días anteriores a la carrera se produce un aumento de tráfico aéreo mientras que la dotación de controladores es inferior. Además, como las plazas de aparcamiento de aviones son limitadas, se habilitan las calles de rodaje -aquellas desde las que el aparato accede a la pista- para aparcar. Son días donde el tráfico se incrementa, con helicópteros de vigilancia, retransmisión televisiva, aparatos medicalizados y aviones privados, explican desde el sindicato de controladores. En este contexto, señalaron que en la edición del año pasado se reforzó el servicio, con cinco controladores por turno; pero ahora "la previsión son tres, salvo el día de la carrera". j. l. g. valencia