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El primer Premio Jaime I que se concede al empresario emprendedor ha sorprendido a Emilio Mateu Sentamans (Guadassuar, 1969) en el tajo. Este ingeniero en Automática y Electrónica Industrial, que hace 9 años abrió en su municipio natal la primera empresa española fabricante de máquinas de corte de precisión por chorro de agua, estaba visitando un cliente en Burdeos al mismo tiempo que en Valencia, un jurado formado por 50 nombres de prestigio, entre ellos 18 premios Nobel, acordaba reconocer su brillante trayectoria empresarial.
Mateu, hijo del propietario de un taller de camiones de este municipio de la Ribera Alta, atendió a Levante-EMV por teléfono camino de Nantes, donde iba a visitar otro cliente. Su firma de Tecnología de Corte e Ingeniería (TCI) Waterjet tiene varias máquinas instaladas en industrias del sector aeronáutico en Francia, donde actualmente está montando una en Montpellier.
"Noticias así te emocionan"
"En estos momentos, noticias así te emocionan. Este premio es para nosotros un plus de gasolina para poder tirar más del carro en la actual situación económica", explica al otro lado del teléfono móvil. Su historia arranca con el diseño de la primera maquinaria de corte por chorro de agua para la industria azulejera de Castelló, y una década después, la firma de Mateu ya tiene máquinas repartidas por China, Venezuela, Argentina, Holanda, Turquía, Alemania y Francia.
TCI Waterjet, que presentó hace dos meses una máquina de corte por láser, da trabajo a unas 55 personas en Guadassuar y fuera de España ha abierto dos filiales, que creo el año pasado en Alemania e Italia, y tiene una red de comerciales propios en estos dos países ademas de Francia y Turquía.
Submarinos y motores de aviones
La expansión de esta compañía valenciana ha sido notable. "En Castelló tenemos unas 20 máquinas cortando cerámica; en los astilleros de Navantia, en Cartagena, también tenemos máquinas cortando las cuadernas de los nuevos submarinos; una en Rumania en una fábrica que hace motores para los aviones Airbus. Esta máquina corta en 3D con mucha precisión piezas interiores de los motores hechas con aleaciones que sólo se pueden cortar con agua", relata.
Uno de los sectores estratégicos en los que se aprovecha esta técnica es el aeroespacial y el aeronáutico, "donde no se permiten tecnologías que aporten calor al corte, porque templan el material y cambian sus características", apunta Así, el corte por agua, al ser en frío, es el único que está homologado en aeronáutica. "En la zona sur de España, todas las empresas que trabajan para Airbus tienen maquinas nuestras para cortar las piezas de los aviones", concluye.
