A pocos días de que arranque el proceso de selección de candidatos en las filas socialistas y con los alcaldables de Valencia y Castellón ya decididos, el escenario del PSPV en Alicante empieza a despejarse. El periodista José María Perea, ex concejal comunista primero entre el 79 y el 82 y socialista después durante el mandato que transcurrió entre 1987 y 1991, es el aspirante que avala la dirección provincial del partido para asumir la candidatura del PSPV-PSOE a la alcaldía de Alicante. El propio Perea ha dado el visto bueno a la operación y está dispuesto a asumir el reto de enfrentarse a la popular Sonia Castedo. La maniobra cuenta con el respaldo total y absoluto de la cúpula de la dirección provincial del PSPV, encabezada por Ana Barceló, con línea directa en Madrid para lograr el placet en la última ronda de negociaciones para elegir alcaldable.

Los socialistas, como se recordará, encargaron una encuesta para tratar de orientar la única decisión que tenían pendiente en las grandes capitales de la Comunidad: la candidatura de Alicante. Alguno de los n0mbres que figuraban en el sondeo, finalmente y por diferentes motivos, han ido decayendo. Antonio Fernández Valenzuela se autoexcluyó de la candidatura. Ángel Luna, opción que tendría las simpatías de José Blanco, no quiere ni oír hablar de la decisión y se centrará en la lista a las Cortes. Así que, al final, encima de la mesa, salvo que Ferraz lanzara una tercera vía -algo que no está a estas alturas aún descartado-, aparece la opción de Roque Moreno, portavoz municipal y secretario del PSPV en la capital, y del periodista alicantino que, desde el primer momento, es el elegido por la dirección provincial del PSPV para asumir la candidatura a la Alcaldía de Alicante, una plaza en la que, en los comicios de 2007, la formación se quedó a las puertas de una victoria electoral frente al Partido Popular.

Malas relaciones

El periodista, militante de la agrupación socialista de Alicante, tiene ganas de asumir el reto para intentar recuperar una Alcaldía que el PP ocupa desde 1995. Dirigentes socialistas son conocedores de la voluntad de José María Perea. El único obstáculo, en estos momentos, es el secretario general del PSPV, Jorge Alarte, que no acaba de valorar, en forma alguna, la candidatura del periodista. Su divorcio político de Ana Barceló -las relaciones entre ambos son más tensas que nunca-, además, no abona la posibilidad de un acuerdo para plantear una candidatura de consenso impulsada conjuntamente y que no encontrara contestación interna.

Y luego está la situación en la que queda Roque Moreno, al que muy pocos ven como candidato pero que es el portavoz municipal y el secretario general del PSPV en Alicante, una jerarquía que los socialistas suelen respetar en la designación de alcaldable. Roque Moreno mantenía la esperanza de que Jorge Alarte, al que en su día respaldó como candidato, tuviera un gesto público para avalar su candidatura a la Alcaldía. Así se lo reclamó hace dos lunes pero sin éxito.