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La factura farmacéutica es lo único que crece en estos tiempos de estrechez y sequía económica. Y lo hace con descaro. Un 7,03 de media en el el territorio nacional respecto al mes de mayo del año pasado y un 5,72 en la Comunitat Valenciana. Un punto más que el mes pasado, como si la salud de los ciudadanos estuviera en un permanente reto con el gobierno de Rodríguez Zapatero, pues todas las medidas de recorte anunciadas parece que arrean aún más el galope de este alazán presupuestario.

Los últimos datos del Ministerio de Sanidad y Política Social informan que el pasado mes de mayo se consumieron en España medicamentos por 1.083.627.672 euros, lo que supone un crecimiento interanual del 4,86. Esta cifra indica el incremento del gasto farmacéutico en el periodo comprendido entre junio de 2009 y mayo de 2010.

Para mantener una apariencia de normalidad, la Dirección General de Farmacia y Productos Sanitarios afirma que se mantiene el crecimiento interanual que en el año 2008 fue de 4,47%.

La Comunitat Valenciana ha sido de las que menos descalabro ha experimentado, con un 5,72% de aumento, que son dos puntos por debajo de la media.

El informe indica que el gasto medio por receta ha crecido un 1,96% respecto a mayo de 2009.

Las comunidades en las que más se disparó el gasto farmacéutico fueron Melilla, con un crecimiento de un 28,35%; Castilla-León, con un aumento de un 12,60%; Galicia con 11,24 y Madrid, con un 10,64%.

El número de recetas facturadas en mayo, que fueron 79.767.155, también ha crecido un 4,97% en comparación del mismo periodo que el año anterior.

La Comunidad Valenciana, por el contrario, ha duplicado el número de recetas expedidas respecto al valor medio nacional, ya que aquí se prescribieron un 8% más. En total, durante el mes de mayo se sacaron de las farmacias 9.622.057 recetas.

Por delante en cuanto a número de recetas emitidas se encuentran Melilla, Castilla-León, Aragón y Madrid.

El único dato más esperanzador del informe es el que alude al gasto medio por receta que ha registrado un aumento del 1,96% en el territorio nacional y un menos 2,11% en la Comunitat Valenciana, siendo la autonomía con el valor más bajo del Estado.