El ex eurodiputado valenciano de Los Verdes -aunque por la lista socialista-, David Hammerstein, que no renovó el acta en las elecciones europeas de 2009, sigue en Bruselas. Hammerstein ejerce de "lobbista" (las personas contratadas por empresas y sectores de todo tipo para influir sobre los europarlamentarios en sus decisiones) fichado por una firma consultora en temas de medio ambiente.

A Hammerstein, con fama de muy activo en el Parlamento Europeo, se le ve a menudo por los edificios de la sede de la Eurocámara. En Bruselas hay nada menos que 15.000 "lobbistas" moviéndose. Fuentes socialistas aseguran que se echa de menos sus intervenciones y sus iniciativas.

El dirigente verde, que obtuvo el acta merced al pacto de su partido con el PSOE y que luego se integró en el grupo de Los Verdes, fue denunciado en su día por una ex asesora que lo acusó de un supuesto desvío de los fondos que da el Parlamento para funcionamiento.

La Oficina Europea para la Lucha Antifraude (Olaf) hizo una investigación en la que Hammerstein salía mal parado. El asunto quedó congelado.

La Olaf acusó al entonces eurodiputado de desviar "decenas de miles de euros" de dinero público a sus cuentas o a las del partido Los Verdes Europeos. La Olaf sostenía que inflaba el sueldo de sus asesores, cosa que negó el eurodiputado.

Dos años después, la misma Olaf le acusó de utilizar su nacionalidad estadounidense y afirmaba que la doble nacionalidad de Hammerstein era irregular puesto que no había convenio de doble nacionalidad. De este modo, decía, no podría tener escaño como eurodiputado en la Eurocámara.

Hammerstein se defendió. Denunció que Zapatero le perseguía por atacar al "padrino" del presidente. Sus denuncias contra el empresario minero Victorino Alonso, en los montes de León, "padrino de Zapatero", estarían detrás de las filtraciones de los informes que le desacreditaban.

Hammerstein aseguró que el Parla mento Europeo le había entregado una carta que certifica que la contabilidad era impecable ("no he desviado un solo euro", insistía) y consideraba "absurdo" la acusación de usar "doble nacionalidad".