El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta, proclamó ayer que, durante el semestre de la presidencia española de la Unión Europea, la Comunitat ha tenido «la mayor concentración de autoridades internacionales de toda su historia».

Peralta destacó que, mientras en la anterior presidencia española, celebrada en 2002, con el Gobierno del Partido Popular, la Comunitat Valenciana sólo acogió un acto de los programados por el Gobierno de España, con el Ejecutivo de Zapatero se han desarrollado nueve actos en esta autonomía.

El delegado señaló que, junto al «incremento cualitativo» de estos actos, hay que destacar la «importante trascendencia» que la Comunitat supone la temática analizada en ellos, que se han referido a cuestiones a seguridad ciudadana y colaboración internacional; cítricos y salud; y el Plan de energía solar del Mediterráneo. Asimismo, la Comunitat Valenciana ha acogido actos dentro de la presidencia española de la UE sobre innovación industrial, servicios postales, e igualdad de la mujer. Para Peralta, la importancia de estos actos acredita «una vez más el compromiso del Gobierno de España» con la Comunitat Valenciana.

Por otro lado, el delegado del Gobierno manifestó que el informe Raxen, en lo relativo a la Comunitat Valenciana, no refleja «en modo alguno» la realidad de esta autonomía. El presidente de Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, anunció esta semana que reclamará una Fiscalía especial para delitos de odio en la Comunitat Valenciana, tras la presentación del Informe Raxen junto con el Defensor del Pueblo, ante la constatación de la proliferación de «manifestaciones diversas de odio y xenofobia protagonizadas por organizaciones que dificultan la cohesión social democrática y la convivencia intercultural». A juicio de Ricardo Peralta, ni los datos ni las valoraciones de la organización reflejan «en modo la realidad de nuestra Comunitat», que tiene, recordó, una presencia de población extranjera superior a la media y con un nivel de convivencia «absolutamente normal».

Peralta especificó que «destacar única y exclusivamente un dato numérico, sin poner en valor la importancia cualitativa de los hechos, no es una manera de reflejar la realidad».