El servicio de comedores escolares de los centros públicos de la Comunitat Valenciana no será gestionado el curso próximo por empresas privadas, como había decidido la Conselleria de Educación antes de que concluyera el curso. El departamento autonómico anunció ayer que la norma queda aplazada un año, por lo que se pondrá en funcionamiento en el 2010-11.

Hasta ahora, el servicio tenía una gestión personalizada y eran los padres, relacionados con la dirección del centro, quienes buscaban a la empresa que consideraban más adecuada.

La nueva norma contempla que sean los servicios territoriales los que decidan tres empresas homologadas, presentadas a concurso. En opinión de la conselleria, los colegios públicos no tienen capacidad jurídica como órgano de contratación con la nueva Ley de Contratos Públicos.

No obstante, y con el curso concluido por las vacaciones, la administración autonómica -que aún no ha informado a los centros- comunicó ayer que "sensible a las peticiones realizadas por parte de las asociaciones de madres y padres y de las direcciones de los centros educativos, se ha decidido retrasar un año la puesta en marcha de esta iniciativa de modelo de gestión de los comedores, que deberá ser aplicada en ese momento en cumplimiento de la nueva Ley estatal de contratación de las administraciones públicas".

Según la nota, "se pretende dar opción a los centros y empresas para que se acomoden al nuevo planteamiento. Por tanto, con este aplazamiento la conselleria atiende la petición de las asociaciones de padres y de las direcciones de los centros quienes lo habían solicitado en los últimos días".