La UTE constructora del tramo de la autovía central del Barranc de la Batalla, en Alcoi, formalizó a las 2 de la tarde de ayer la paralización de las obras en protesta por el anuncio del Ministerio de Fomento de aplazar hasta 2012 el pago de las cantidades pendientes, que ascienden a 20 millones de euros. La clausura de la obra se produjo después de que la empresa despidiese a un número de trabajadores que no ha trascendido. Es el último tramo de la autovía central y debía haberse completado en 2010, pero será difícil que este objetivo se cumpla y que se pueda circular entre Alicante y Valencia por Alcoi a través de una carretera de cuatro carriles.

Fomento notificó a mediados de semana a Ferrovial y Hormigones Martínez que, por la crisis, reprogramaba inversiones en curso; en este caso, los 9 millones que se debían desembolsar este año y los 11 del proyecto modificado -que incluye los falsos túneles por los murciélagos- a punto de aprobarse, se aplazaban a 2012. La respuesta de la UTE fue inmediata: paralizar las obras. En los últimos dos días, según ha podido saber este diario, los trabajos se han centrado en la consolidación de las obras, acabando el hormigonado y dejando la zona en las condiciones adecuadas para una etapa de inactividad como la que ha comenzado; además, se ha retirado maquinaria, según el diputado Amando Vilaplana. En la zona va a quedar un retén de seguridad, para vigilar las obras y la maquinaria que permanezca.

Hay quien considera esta decisión de la UTE como una "estrategia" de cara a Fomento. Las empresas y el ministerio mantuvieron ayer una reunión para estudiar la situación, que complica la finalización de una autovía encarrilada. Curiosamente, la Conselleria de Infraestructuras también ha desbloqueado el primer desvío de la carretera comarcal hacia Benimarfull, en el tramo de autovía Muro-Cocentaina. Este vial debía haberse inaugurado ya pero la tardanza del Consell en autorizar estos dos desvíos, aduciendo que Fomento no había pedido los permisos de manera correcta, va a impedirlo

La operación salida deja retenciones en la A-3, la V-31 y la V-21

La Operación Especial Primero de Agosto provocó ayer diversas retenciones en carreteras de la Comunitat Valenciana, fundamentalmente en la A-3, la V-31, la A-70 y la V-21, según el Centro de Gestión de Tráfico. Durante la tarde del viernes, la autovía A-3, que suele acumular retenciones en todas las operaciones salida y retorno, presentó unos tres kilómetros de tráfico lento en Riba-roja, en sentido Valencia, y otros dos a la altura de Loriguilla, en dirección Madrid. Además, un accidente sin daños personales registrado en la V-31, en Catarroja, provocó cuatro kilómetros de retenciones. La V-21 también sufrió colas de unos dos kilómetros en la entrada de Valencia, al igual que la CV-500, la Carretera de El Saler, a su paso por Cullera. En la provincia de Alicante, los principales problemas de circulación se registraron en la A-70, con unos dos kilómetros de retenciones en dirección Valencia.

Tráfico calcula que habrá unos 2.118.000 movimientos de vehículos en las carreteras de la Comunitat Valenciana desde las 15.00 horas del viernes y hasta las 24.00 horas de mañana domingo, 1 de agosto, en el transcurso de la Operación Especial Primero de Agosto del verano 2010. De esta cifra, corresponden a la provincia de Valencia 1.136.000 desplazamientos, 682.000 a Alicante y 300.000 a Castelló. e.