La primera muerte en los "bous al carrer" de este año en la Comunitat Valenciana, un toro embolado degolló en la madrugada del domingo a un hombre en Godella que había sido expulsado del recinto hasta en dos ocasiones por la organización al "considerar que no estaba en condiciones", le ha dado una cornada al reglamento autonómico que regula estos festejos.

La escueta reacción de la Conselleria de Gobernación que dirige Serafín Castellano ante el fatal suceso -"Sólo podemos comentar que los colaboradores voluntarios cumplieron con su labor y que los festejos cumplían con toda la normativa", señaló un portavoz- deja un gran interrogante en el aire: ¿Por qué hubo un fallecido si se cumplieron todas las normas?

Efectivamente, tanto el Reglamento de Festejos Taurinos Tradicionales en la C. Valenciana de 2007 como la orden que ha entrado en vigor este año que concreta las funciones de los colaboradores voluntarios (ver recuadro) encargados de vigilar el festejo, regula la expulsión de los menores de 16 años y las personas que no estén en condiciones. Sin embargo, una vez fuera del recinto, nada evita, como tristemente se ha visto en Godella, que estas personas vuelvan a entrar.

El marco legal no establece controles de acceso que impidan ese retorno, ni impone ningún tope de edad por encima del cual no se deba correr ante un toro, ni tampoco prohibe el consumo y la venta de alcohol en los "bous al carrer", ni establece sanciones disuasorias para los expulsados. El portavoz de la Plataforma Antitaurina de Valencia, Antonio Moreno, pone el dedo en la llaga: "No se puede garantizar la seguridad de los asistentes a esos "espectáculos" si cualquiera puede acceder a ellos".

Sin embargo el presidente de la federación autonómica de "bous al carrer", Manuel Vicent, es contrario a que se habiliten más medidas ya que entiende que la normativa "es muy severa". "Con 6.000 festejos que habrá este año en la C. Valenciana, que por ahora sólo haya un muerto demuestra que la normativa funciona y los voluntarios de las peñas taurinas se esfuerzan porque se cumpla", concluye.