El Grupo para el Estudio y Conservación de los Espacios Naturales (Gecen) ha denunciado el "enorme desprecio" a las normas medioambientales que ha supuesto el abandono del vivero que se creó a pie de la CV-13, que agrupaba miles de especies que tenían que haber sido plantadas en los taludes y entorno inmediato de la carretera para restaurar paisajísticamente el entorno de la carretera y minimizar el impacto ambiental del vial.

Las plantas y árboles se han muerto por falta de riego, según dio a conocer la organización ecologista.

Para poner en marcha estas actuaciones de revegetación se destinaron 850.000 euros en crear un vivero que incluía parte de las plantas y árboles que había eliminado la construcción de la carretera.

Sin embargo, en la actualidad ese vivero que era la respuesta a la declaración de impacto ambiental de la obra de la CV-13 está asolado.

"No es más que una muestra de cientos de plantas secas por la desidia y el más absoluto desprecio de la Administración que ha abandonado a su suerte dicho vivero sin regarlo ni cuidarlo", declaró Gecen.

La organización no gubernamental exige a la Conselleria de Medio Ambiente que depure responsabilidades y asuma las propias en esta dilapidación de dinero público.

"Esa depuración debe buscar la consecución de los objetivos medioambientales de la obra, corriendo con los gastos derivados de la nefasta gestión del vivero a cargo de quienes fueran los responsables de ello", expresó la ONG.

Gecen ha instado a la conselleria a investigar lo ocurrido. La organización ha exigido al conseller de Medio Ambiente, Juan Cotino, "que se ponga por una vez al servicio del medio ambiente y evite cualquier atisbo de laxitud o complicidad" con los encargados de la gestión del vivero que ha quedado agostado tras una completa dejadez y desidia en el cuidado de la vegetación.

La organización ha sido muy crítica con este tipo de actuaciones de revegetación que se publicitan como imagen medioambiental y luego se incumplen.

La C-13, que ejecuta la Generalitat Valenciana, enlaza la autovía de la Plana desde Torreblanca con la N-340 y se diseñó para dar una buena conexión al aeropuerto de Vilanova, que se abrirá al tráfico a finales de año.