El Conseller de Infraestructuras, Mario Flores, anunció ayer que el Ministerio de Fomento recurrirá al modelo de Colaboración Público Privada (CPP) para financiar la construcción del túnel del AVE que atravesará Valencia de sur a norte, así como también el soterramiento de las vías de Alta Velocidad a su paso por Sagunt. Para este segundo caso, avanzó que ambas Administraciones constituirán una sociedad mixta "participada por ayuntamiento, ministerio y conselleria", además del socio concesionario. Ambas infraestructuras son vitales para la vertebración de las comunicaciones ya que también albergarán las líneas de Cercanías.

El eje subterráneo que irá desde la futura estación del Parque Central hasta Alboraia, conocido como túnel pasante, tiene un coste estimado de 750 millones de euros. Cuenta con una longitud de 5,6 kilómetros e incluye dos estaciones: una en la avenida de Aragón y otra en la zona universitaria de la avenida de los Naranjos.

Fomento tenía previsto licitar dicha obra clave este año, pero los recortes presupuestarios han demorado los plazos. El conseller Flores, tras la reunión de cuatro horas y media que mantuvo el miércoles en Madrid con el secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, señaló ayer que el ministerio "ha encargado un estudio sobre la financiación del túnel pasante que estará acabado en tres o cuatro meses con el fin de poder sacar cuanto antes ese proyecto".

Flores justifico este informe porque, según relató, "para hacer un modelo de CPP tiene que haber unos pliegos que no computen deuda". Al ordenar Bruselas que España reduzca su déficit público, este tipo de concesiones -a través de peajes directos o indirectos (en sombra) o pago aplazado- permiten al Gobierno ejecutar obras sin contabilizarlas en sus presupuestos. Sin embargo, si los sobrecostes se disparan, como ya le ha ocurrido a España, la Oficina Europea de Estadísticas (Eurostat) obliga a que esas obras se consideren deuda y figuren en las cuentas públicas.

En este sentido, el conseller destacó el alto riesgo de esta actuación: "En el momento que intervienen los túneles se incrementa la incertidumbre dentro de la ejecución de la obra, disparando el coste final de la misma". "Las actuaciones de soterramiento son más complicadas, sobre todo en entornos urbanos, con lo que puede haber problemas para que la Intervención General del Estado y Eurostat den el visto bueno para que esa actuación no compute deuda", aclaró.

Así pues, Fomento busca la fórmula para encajar la financiación del eje pasante dentro de un modelo CPP, como ya se ha hecho en túnel de Le Perthus que, a partir del 12 de diciembre, conectará las líneas de Alta Velocidad de Francia y España. En este caso, el peaje que la concesionaria va a cobrar a las operadoras por el paso de trenes será de 1.350 euros para los de pasajeros y 550 para los de mercancías.

Licitaciones vía concesión

"Me da la impresión de que las nuevas licitaciones que vaya a hacer Fomento serán por el modelo CPP, porque se han quedado sin presupuesto por los recortes del Gobierno", concluyó el conseller.

En cuanto al Plan de Cercanías, además del protocolo que firmarán en octubre Fomento y el Consell para impulsar el tren Valencia-Alicante por la costa, Flores informó que han pactado "estudiar la viabilidad económica del soterramiento de vías en Alfafar, Benetússer, Aldaia, Alaquàs, Xirivella, Meliana y Puçol, debiendo analizarse la mejor solución para cada caso". La secretaria general de Infraestructuras del ministerio, Inmaculada Rodríguez-Piñero, añadió el miércoles a esta lista el túnel de Silla.

Flores: "Mi conselleria paga a tiempo"

"Nosotros no hemos retrasado ningún pago, mi conselleria paga las certificaciones de obra a tiempo, y los temas que se atrasan un poco más, como los modificados, se han agilizado un 50% según me confirmaron hace dos semanas desde la Cámara de Contratistas y Fecoval (la federación autonómica de empresas Contratistas de la Administración), con lo cual los contratistas están muy contentos". Así a contestó ayer el conseller de Infraestructuras, Mario Flores, a las acusaciones vertidas el miércoles en el Congreso por el Ministro de Fomento, José Blanco. Éste, en la réplica a un diputado del PP que le exigía saber cuántos empleos se perderán por el recorte en infraestructuras, afirmó que el "mayor ajuste de obra pública" se ha producido en autonomías gobernadas por el PP, como la C. Valencia, "donde las constructoras son inviables porque se tarda dos años en pagarles".

El conseller reconoció que, efectivamente, "algunas obras se pagan dos años después de su finalización, pero porque se licitan con aplazamiento de pago, por tanto el adjudicatario no puede decir que le están retrasando los pagos".

Finalmente, Flores, alardeó de que su consellería "no ha parado ninguna obra, y el Gobierno sí".