El vicepresidente tercero de la Generalitat y conseller de Medio Ambiente, Juan Cotino, compareció ayer para dejar clara la negativa del Consell a que la localidad valenciana de Zarra acoja el futuro cementerio nuclear. Cotino realizó esas declaraciones porque uno de los puntos del día del Consejo de Ministros de ayer era designar la ubicación de dicho cementerio y, a priori, Zarra partía como favorita.

Juan Cotino, acompañado por la portavoz de la Generalitat, Paula Sánchez de León, aseguró que "si el Gobierno Central elige Zarra, el Consell recurrirá la decisión para evitar que el proyecto siga adelante". De hecho la confusión sobre el tema fue tal magnitud que a mitad de su comparecencia Cotino aseguró que "Zarra había sido elegida y que ningún ministro había llamado para informales de dicha decisión o para tratar de limar asperezas". Sin embargo, este extremo fue posteriormente desmentido por fuentes del Gobierno Central, ya que la propia vicepresidenta del Gobierno dijo que la decisión ha quedado pospuesta.

Según informaron fuentes de la Generalitat, la confusión se produjo porque el secretario de Estado para la Energía, Pedro Marín Uribe, llamó al conseller de Industria, Vicente Rambla, para informarle de la decisión que iba a ser adoptada por el Consejo de Ministros, que se hallaba reunido en ese momento.

En cuanto a la negativa por parte de la Generalitat a que esta localidad, que se encuentra próxima a la central nuclear de Cofrentes, acoja el almacén Temporal Centralizado (ATC), Cotino explicó que "existe un informe técnico que indica que existen diversos problemas". Entre ellos, el vicepresidente aseveró que "los más importantes son los relativos al tipo de suelo de la zona, los de tipo sísmico y la ubicación de los terrenos que plantean serios inconvenientes en lo referido al transporte de los residuos".

En cuanto a cómo afectará a la autonomía municipal de Zarra si al final el Consell adopta la decisión de recurrir, Sánchez de León manifestó su "respeto absoluto". No obstante, indicó que esta autonomía municipal "no puede colisionar con informes contradictorios respecto a una actuación", en relación a los informes que "tajantemente" se oponen a la ubicación. Esta respuesta supone un cambio de actitud de la Generalitat, ya que Serafín Castellano dijo en las Corts que "el Consell sería absolutamente respetuoso con la autonomía local".

Rus aconsejó que no fuera Cotino el que anunciara la decisión

La comparecencia de Juan Cotino ante los medios de comunicación estuvo precedida de una pequeña marejada interna. Según pudo saber Levante-EMV, cuando se había decidido que fuera Cotino el que compareciera junto a la portavoz Paula Sánchez de León, el presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, recordó que varios de los terrenos que se encuentran ubicados donde se quiere construir el cementerio nuclear pertenecen a la familia Cotino y que, debido a eso, no era buena idea que fuera él el que anunciara la posición de la Generalitat sobre el asunto. Tras una votación se decidió que Francisco Camps fuera la persona que bajara a la sala de prensa junto a Sánchez de León. Al parecer, a Camps la idea no le gustó nada y la desactivó.

Por otro lado, Alfonso Rus aseguró ayer que "el gobierno valenciano hará lo que tenga que hacer para que el cementerio no vaya a Zarra". El presidente de la diputación se desdice así respecto a su posición hace siete meses, cuando Zarra comenzó a postularse como posible candidata. En febrero, Rus rechazó en el pleno una moción presentada por el Bloc en la que instaba a un posicionamiento común de rechazo. En aquella ocasión, defendió la "autonomía" del Ayuntamiento de Zarra.