El déficit en financiación por habitante de la Comunitat Valenciana respecto a la media de las autonomías tendrá un enorme coste para las arcas de la Generalitat. Nada menos que 732 millones es lo que la hacienda valenciana "perderá" en 2011 -año en el que el nuevo modelo aprobado en 2009 complete su puesta en marcha- al quedar lejos de la media en recursos per cápita del conjunto de autonomías. Es la demoledora conclusión del informe de la Comisión de Expertos independientes nombrados por los grupos parlamentarios de las Corts, que ya circula por los despachos del Consell y que el Ejecutivo tiene previsto entregar a la Cámara a finales de esta semana, en vísperas del debate de política general que tendrá lugar el lunes. Fuentes conocedoras del contenido del documento aseguraron que los expertos instan a las Corts a propiciar un pacto social y político que permita reclamar al Gobierno una solución al grave problema financiero que se avecina.

Tal como adelantó Levante-EMV, los expertos advierten de que la combinación de la crisis y un nuevo sistema de financiación que resulta insuficiente -si bien admiten que mejora los números del modelo Zaplana aprobado en la etapa Aznar- puede abocar a la Generalitat a una difícil situación, hasta el punto de que la oferta de servicios públicos (educación, sanidad, servicios sociales) se verá amenazada. O, lo que es lo mismo, si no se pone remedio, habrá que recortar servicios que se prestan a los ciudadanos en el marco del estado de bienestar. Para colmo, el endeudamiento se disparará más.

En el informe, los expertos han hecho sus números, siempre según las fuentes citadas. Así, se destaca que el nuevo modelo del Gobierno acorta la distancia de la Comunitat respecto a la media en recursos por habitante en relación al anterior sistema. Sin embargo, ésta sigue quedando lejos de la media; en concreto, un 8% por debajo en 2011. En ese ejercicio, la Generalitat ingresará con el nuevo marco 1.560 millones adicionales, pero debería recibir 2.292 millones más si el reparto se realizara directamente en función de la población ajustada. Esto es, si sus ingresos se igualaran a la media estatal per cápita.

Los argumentos del Consell

El documento también analiza las consecuencias del modelo Zaplana, aplicado entre 2002 y 2008. Las fuentes citadas subrayaron que el informe avala las tesis del Consell y del PP al concluir que la Comunitat ha perdido 500 millones anuales al no haberse actualizado las cifras de población (una actualización que no permitía el sistema aprobado con Aznar). También revela que, de haberse producido esta actualización de recursos en función de la población que realmente tenía la Comunitat (los fondos se repartían de acuerdo con el censo de 1999), el endeudamiento de la Generalitat habría podido reducirse en 3.400 millones.

La crisis anula la mejora del 7%

El análisis reconoce la mejora en los fondos con el nuevo sistema, que aumentará a medida que se implante el modelo. Así, constata que en 2009 supuso unos fondos adicionales de 915,8 millones, un 7% más respecto a la financiación con el modelo Zaplana, que pasarán a los citados 1.560 en 2011. Sin embargo, el desplome de los ingresos tributarios por la crisis anula este incremento, de forma que la situación financiera del Consell, aunque sea por el bache económico y no por el propio modelo, no encontrará una solución. Tan es así que, al igual que ha ocurrido en 2009, es previsible que los ingresos totales del Consell desciendan (como en el resto de autonomías).

Ante todo ello, los expertos piden una revisión del modelo de financiación, así como medidas especiales para compensar el agravio, como la deuda histórica reconocida a otras comunidades autónomas. Junto a ello, un pacto social y político. En caso contrario, alertan de que está en juego la sostenibilidad del estado de bienestar.